Me acabo de encontrar con mi amigo Toñi, marido de Isabel, una pareja jubilada, relativamente joven. Sus “niños” ya están criados y ahora ellos se dedican a vivir relajados, ocupándose de las aficiones que durante su vida laboral han tenido un poco aparcadas, cuidando el uno del otro, sin ganas de complicarse mucho la existencia. […]