Hace no demasiados años realicé mi primer Ultra Trail (en el siguiente post os explico de qué va esto de los trails). Fueron algo más de 100 km los que recorrí por la sierra de Sao Mamede, en Portugal. Desde entonces he realizado ya varias carreras de esta distancia, y en todas hay algo que nunca olvidas.

Recuerdo el primer año en Sao Mamede que conocí a Vitorino Coragem, un corredor de ‘avanzada edad’,  aunque con un espíritu y fortaleza muy joven. En el Trail del Aneto me ayudó, y mucho, un señor de unos 55 años que me alcanzó cuando pasaba por uno de los peores momentos que jamás haya pasado en una carrera. Me animó y empujó hasta pasar lo peor de la carrera, a la vez que me asombraba por la fuerza que llevaba.

Dos leyendas del Trail Portugués en TCVS2015

Después, tuve el placer de conocer a Analice Silva. Esta mujer o chiquilla de 70 años me deja sin palabras cuando la veo enfrentarse a carreras tan extremas. Estuve con ella también en el UTSM 2014 y en el Trofeu Trail Vicentino, una durísima carrera. Se queda uno sin palabras.

En casa tenemos a Super Paco  (El Abuelo de Cártama, más de 75 años) que ha completado carreras como el Última Frontera (160 km), UT Sierra de Bandoleros (145km) y ha participado varias veces en el mítico Ultra trail del Mont Blanc (donde fue descalificado en 2009, a falta de 18 km de 166 por equivocación de itinerario).

Hoy os quiero dejar también un vídeo, de Elisa Forti. Acaba de terminar una carrera de tres etapas. 25.6km+42km+35km superando en total más de 4.000m de desnivel positivo en una carrera que cruza los Andes uniendo Argentina y Chile. Elisa Forti tiene 80 años, y no es la primera vez que completa esta prueba que cada año cambia su recorrido.

A mí me dejan totalmente impresionado estas hazañas, y me obliga a hacerme la pregunta de hasta dónde podemos llegar. ¿Cuáles son realmente nuestros límites?

Lo cierto es que muchos ya no nos conformamos con carreras de media maratón, ni tan siquiera con los maratones. A veces necesitamos retos más exigentes, inalcanzables, podríamos pensar muchas veces, pero la satisfacción de cruzar la línea de meta, no es fácilmente descriptible. A pesar de haber completado varias carreras de este tipo, aún me sigo emocionando cada vez que las termino, así que imaginaos lo que tiene que ser terminar con la edad de estos grandísimos corredores.

No sé los secretos para llegar con esa vitalidad, esas ganas y esa fuerza, pero no tengo ninguna duda de que sería un sueño poder seguir corriendo con 80 años carreras de ultradistancia.

Aprendemos una nueva lección.

Os dejo la entrevista de Elisa Forti al terminar la carrera El Cruce Columbia 2015.