Los sorteos para ir al Ejército se hacían ya en España en 1770, cuando el rey Carlos III dictó una ordenanza por la que uno de cada cinco jóvenes (de ahí la expresión ‘los quintos’) tenían que incorporarse al servicio militar. El enganche entonces era de 15 años, los elegidos tenían que tener entre 16 y 40 años y medir más de 1,40 metros.
En la imagen vemos un sorteo en Cáceres para conocer los jóvenes que iban a hacer el servicio militar. Según una información publicada en HOY el 23 de noviembre de 1981. A las nueve de la mañana del domingo, en el cuartel Infanta Isabel, se hizo el sorteo de mozos pertenecientes al reemplazo de 1981. Se sortearon 3.465 jóvenes para ocho llamamientos. A cada llamamiento le correspondía 434 mozos, excepto el octavo que eran 427. La bola de la suerte fue la del número 28, del 1 al 27 de cada llamamiento fueron excedentes de cupo; es decir, no tuvieron que hacer la mili. En otra información publicada en HOY el 27 de noviembre de 1984 se indicaba que se sortearon 908 mozos del reemplazo de 1985, 84 quedaron excedentes de cupo. También se sorteaban los destinos, 36 tuvieron que hacer el servicio militar en Ceuta y otros tantos en Melilla.