LA ILUSIÓN DE UNA COMUNIDAD
Desde corta edad me ha apasionado el famoso balompié. Pero siempre me he preguntado, ¿dónde está el fútbol extremeño?
Recuerdo desde hace muchos años mirar ese grupo cuarto de 2ª división B en la que competían los equipos de la región con la ilusión de que alguno consiguiera acceder algún día a la Segunda División y, por ende, volver al fútbol profesional. Muchos años han pasado desde que el ya extinto C.D. Badajoz perdiera su plaza en la Segunda División, siendo este el último equipo extremeño en participar en el fútbol profesional (allá por el año 2003).
Por tanto, mi recuerdo de aquel auge del fútbol extremeño es algo borroso, pero, aunque sea sorprendente, nuestro balompié estaba presente tanto en Primera como en Segunda División. Tras la desaparición de los nuestros de la élite, la catástrofe apareció: desparecieron el C.P. Mérida, el C.F. Extremadura y el C.D. Badajoz, tres de los principales equipos de
Álex Barrera celebra el primer gol del Extremadura en su vuelta a Segunda |Fuente: Liga 123
nuestra región. Estos tres equipos se refundaron con diferentes denominaciones similares para volver a competir, pero también con el objetivo de devolver al fútbol extremeño donde se merece.
Muchos años, muchas deudas y muchas ocasiones perdidas después este objetivo de toda una región se hizo realidad concretamente en junio de este año cuando, por fin, el refundado Extremadura U.D. (sucesor del C.F. Extremadura) consiguió ascender con mucho esfuerzo y dificultades a la división de plata del fútbol español. Esta última afirmación no es un “tipicazo”: el equipo estuvo toda la temporada cerca de la zona play-off, pero con una situación institucional incierta, además de una sucesión de diferentes entrenadores constante. Llegaban las últimas jornadas y el equipo, entrenado por Martín Vázquez, se encontraba fuera del play-off, lo que propició la destitución del técnico, siendo sustituido por Juan Sabas, quien ya salvó al equipo de volver a Tercera la anterior temporada y que fue destituido justo antes de empezar la campaña por desavenencias con la directiva. Este comandó a los almendralejenses hasta conseguir alcanzar la zona play-off para luego llegar a la Liga 123 superando tres eliminatorias. Por fin, Extremadura volvía a la Liga de Fútbol Profesional.
¿Cómo una comunidad tan futbolera como la nuestra puede haber sufrido tanto para volver a la Liga de Fútbol Profesional? Pues evidentemente, además de la crisis económica, la gestión de los clubes ha sido nefasta. Incluso el Extremadura U.D., flamante nuevo equipo de Segunda, ha tenido ya ciertos problemas en sus 11 años de historia.
Es sorprendente también como esos futboleros, teniendo equipos cercanos se siguen enfrascando en la lejana rivalidad Madrid-Barça, siendo ajeno para ellos algo histórico y costoso como ha sido esta hazaña del Extremadura Unión Deportiva.
Solo nos cabe esperar que el resto de la región siga el ejemplo, sobre todo los competidores de este año en la categoría de bronce (Don Benito, Badajoz y Villanovense).
¡Por un fútbol extremeño digno y relevante de nuevo!