Sexismo infantil | #JovenesHOY - Blogs hoy.es >

Blogs

#JovenesHOY

Sexismo infantil

Vivimos en un mundo desigual en una lucha constante, en una lucha constante mediante: sindicatos, huelgas, leyes, innovaciones en modelos educativos y una larga lista de pequeñas revoluciones. Y en medio de todo este cambio yo me pregunto… ¿Y los niños? ¿Es que nadie ha pensado en los niños? Si bien es cierto que los más mayores hemos logrado una mayor visualización y conciencia del problema, creo que todos coincidimos en que las nuevas generaciones son cruciales en la lucha del cambio ideológico.

¿Y cuáles son los organismos claves para una educación responsable y consciente de los problemas que conlleva una sociedad sexista? La familia y el sistema educativo obligatorio, pero en este caso centrémonos en la familia, ese grupo protector del bienestar infantil que nos enseña qué está bien y qué no desde el momento en que nacemos. La familia está presente en nuestros primeros años de vida, momento en que nuestro cerebro está en plena sinaptogénesis, es decir, nuestro cerebro aún no está del todo formado y las experiencias vividas en esta serán cruciales para la formación del sujeto como individuo propio y como miembro de una sociedad.

A pesar de esto muchos eluden su responsabilidad argumentando que las preferencias más masculinas y femeninas vienen determinadas biológicamente. Pues, ¡sorpresa! Esto no es del todo correcto. Cuando el embrión se encuentra en proceso de gestación sus futuras preferencias sexuales y, el rol de género que asumirá con mayor facilidad será determinado a lo largo de todo el embarazo. El feto desarrolla hormonas propias de su sexo, andrógenos para los hombres y estrógenos para las mujeres. No obstante, las hormonas ajenas obtenidas en el útero materno, junto a factores ambientales y la propia sensibilidad a las hormonas son un punto clave.

Entonces, ¿qué hay de malo en inculcar a los más pequeños un rol de género? Continuando con la biología debemos tener en cuenta que no todos somos igual de sensibles a las hormonas, por lo que no tenemos por qué asumir el rol de género que corresponde a nuestros genitales. Es posible observar este fenómeno en problemas reales, como la disforia de género.

Por otro lado, muchas de las características asociadas a un rol no tienen nada que ver con la biología. Un claro ejemplo de esto son los colores de la ropa, que curiosamente solían usarse de forma inversa a la actual. Antiguamente el rosa era un color masculino, asociado a la sangre y la valentía, mientras que el azul, considerado un color calmado, era propiamente femenino. Del mismo modo, antiguamente en algunos países el fútbol era propio de las mujeres, mientras que en otros siempre fue prioritariamente masculino.

El sexismo en la infancia es un problema en nuestro día a día, uno que invade la libertad de la elección generación tras generación provocando bullying, disforia de sexo y constantes luchas internas en aquellos cuya identidad no está más que comenzando a formarse. ¡Podemos cambiar esto!

 

Otro sitio más de Comunidad Blogs Hoy.es

Sobre el autor


agosto 2019
MTWTFSS
   1234
567891011
12131415161718
19202122232425
262728293031