La UBEx (Unión de Bibliófilos Extremeños) quiso apostar fuerte para celebrar su 25º aniversario. Impulsada por quien ha sido siempre su más eficaz animador, Joaquín González Manzanares, ha dado otra prueba de eficacia en la línea que le imponen sus estatutos: contribuir al rescate y defensa de nuestro patrimonio cultural en el campo de los libros. Lo ha hecho, como en tantas otras ocasiones, acercando a los lectores contemporáneos una antigua joya, ciertamente más citada que conocida (a excepción, tal vez, de sus admirables grabados). Me refiero al Viaje pintoresco e histórico de España, de Alexandre de Laborde (París, 1773-1842).
Su autor fue un hombre singular, rico, culto e influyente. Hijo de un banquero aragonés, supo labrarse en Francia importante carrera como diplomático, sin dejar de interesarse nunca por el país de sus ancestros. Prototipo de “hispanista” galo, llegó a Madrid el año 1800 como agregado militar de la Embajada francesa. Poco después tenía diseñado un ambicioso proyecto: componer una obra donde se recogiesen y estudiasen los monumentos arquitectónicos más relevantes de la Península, vías y calzadas de comunicación incluidas. Entre 1806-1820 aparecerían los cuatro tomos que componen su formidable y a la postre inconclusa obra, cuyo valor histórico, estético y estratégico (las fuerzas de Napoleón lo saben bien) resulta innegable.
Para llevar a buen fin tamaña tarea, que incluía el alzado de los monumentos y su correspondiente estudio, debidamente contextualizados, Laborde supo acompañarse de un buen equipo, una veintena de dibujantes, grabadores, historiadores, geógrafos, etc. Recabó también la ayuda de Manuel Godoy, a quien está dedicado el Viaje y que en sus Memorias (1839) explica las razones que lo motivaron: “ Interesaba mucho a nuestra historia, e interesaba nada menos a nuestra arqueología y a nuestra arquitectura y escultura: se necesitaba eternizar por el dibujo y el grabado lo que la voracidad del tiempo podría llevarse en adelante”, escribe el prócer.
La edición de la UBEx comprende lo referido a Extremadura. Se trata de un extraordinario volumen, del que se han hecho 250 ejemplares numerados, con tipografía Garamond y Bodoni para los títulos, impresos a color sobre papel hilo verjurado, cosido con hilo vegetal y portada en tapa dura. Incluye el saludo protocolario de Guillermo Fernández Vara, con elocuentes elogios hacia la UBEx; un conciso preliminar de Joaquín González Manzanares y el extenso estudio introductorio de Jesús Mª García Calderón.
Son 46 las láminas que reproducen las ciudades y monumentos más significativos de la Región, tal como se encontraban entonces (en ruina muchos de ellos). La reedición se ha hecho según el ejemplar iluminado que conserva el librero Guillermo Blázquez. Mérida y Guadalupe son las poblaciones más representativas, si bien no faltan imágenes de Cáceres, Badajoz (a la que se sigue identificando con la Pax Augusta romana), Coria, Alcántara, Alange y otras muchas. Conmueve tanta belleza en peligro de desaparición. Y no menos las dolorosas apreciaciones que Laborde hace sobre Extremadura, muy semejantes a las recogidas por Gregorio de Salas en su famosa décima. Iconografía y análisis sociopolítico hoy felizmente superados, aunque tampoco es que la región se halle como para echar las campanas al aire.
El diseño, impresión y encuadernación estuvo a cargo de Efezeta, el último que este taller realizase antes de su cierre definitivo. Con él puso un broche a sus inolvidables labores gráficas.
En cuanto a la UBEx, ahora dirigida por Matilde Muro, sólo cabe desear que prosiga su trayectoria, aunque el camino resulte en ocasiones fatigoso.
Alexandre Laborde, Viaje pintoresco e histórico de España. Descripción de Extremadura. Badajoz, UBEx, 2018.
LABORDE REACTIVAD0
La UBEx (Unión de Bibliófilos Extremeños) quiso apostar fuerte para celebrar su 25º aniversario. Impulsada por quien ha sido siempre su más eficaz animador, Joaquín González Manzanares, ha dado otra prueba de eficacia en la línea que le imponen sus estatutos: contribuir al rescate y defensa de nuestro patrimonio cultural en el campo de los libros. Lo ha hecho, como en tantas otras ocasiones, acercando a los lectores contemporáneos una antigua joya, ciertamente más citada que conocida (a excepción, tal vez, de sus admirables grabados). Me refiero al Viaje pintoresco e histórico de España, de Alexandre de Laborde (París, 1773-1842).
Su autor fue un hombre singular, rico, culto e influyente. Hijo de un banquero aragonés, supo labrarse en Francia importante carrera como diplomático, sin dejar de interesarse nunca por el país de sus ancestros. Prototipo de “hispanista” galo, llegó a Madrid el año 1800 como agregado militar de la Embajada francesa. Poco después tenía diseñado un ambicioso proyecto: componer una obra donde se recogiesen y estudiasen los monumentos arquitectónicos más relevantes de la Península, vías y calzadas de comunicación incluidas. Entre 1806-1820 aparecerían los cuatro tomos que componen su formidable y a la postre inconclusa obra, cuyo valor histórico, estético y estratégico (las fuerzas de Napoleón lo saben bien) resulta innegable.
Para llevar a buen fin tamaña tarea, que incluía el alzado de los monumentos y su correspondiente estudio, debidamente contextualizados, Laborde supo acompañarse de un buen equipo, una veintena de dibujantes, grabadores, historiadores, geógrafos, etc. Recabó también la ayuda de Manuel Godoy, a quien está dedicado el Viaje y que en sus Memorias (1839) explica las razones que lo motivaron: “ Interesaba mucho a nuestra historia, e interesaba nada menos a nuestra arqueología y a nuestra arquitectura y escultura: se necesitaba eternizar por el dibujo y el grabado lo que la voracidad del tiempo podría llevarse en adelante”, escribe el prócer.
La edición de la UBEx comprende lo referido a Extremadura. Se trata de un extraordinario volumen, del que se han hecho 250 ejemplares numerados, con tipografía Garamond y Bodoni para los títulos, impresos a color sobre papel hilo verjurado, cosido con hilo vegetal y portada en tapa dura. Incluye el saludo protocolario de Guillermo Fernández Vara, con elocuentes elogios hacia la UBEx; un conciso preliminar de Joaquín González Manzanares y el extenso estudio introductorio de Jesús Mª García Calderón.
Son 46 las láminas que reproducen las ciudades y monumentos más significativos de la Región, tal como se encontraban entonces (en ruina muchos de ellos). La reedición se ha hecho según el ejemplar iluminado que conserva el librero Guillermo Blázquez. Mérida y Guadalupe son las poblaciones más representativas, si bien no faltan imágenes de Cáceres, Badajoz (a la que se sigue identificando con la Pax Augusta romana), Coria, Alcántara, Alange y otras muchas. Conmueve tanta belleza en peligro de desaparición. Y no menos las dolorosas apreciaciones que Laborde hace sobre Extremadura, muy semejantes a las recogidas por Gregorio de Salas en su famosa décima. Iconografía y análisis sociopolítico hoy felizmente superados, aunque tampoco es que la región se halle como para echar las campanas al aire.
El diseño, impresión y encuadernación estuvo a cargo de Efezeta, el último que este taller realizase antes de su cierre definitivo. Con él puso un broche a sus inolvidables labores gráficas.
En cuanto a la UBEx, ahora dirigida por Matilde Muro, sólo cabe desear que prosiga su trayectoria, aunque el camino resulte en ocasiones fatigoso.
Alexandre Laborde, Viaje pintoresco e histórico de España. Descripción de Extremadura. Badajoz, UBEx, 2018.