Las vacaciones de la pasada semana supusieron para muchos la oportunidad de sacar la ropa de verano de los armarios y meter el bikini o las bermudas en la maleta. Si este fue tu caso, recuerda cómo debes tratar estas prendas para que te duren hasta el final de verano, por lo menos. Aunque parezca un consejo de perogrullo, acláralas después de cada uso con abundante agua fría para eliminar los restos de cloro, cremas solares o sal. Lávalas frecuentemente con jabón neutro y agua templada, pero nunca añadas lejía al cajetín de la lavadora. Evita el contacto directo con el sol u otras fuentes de calor directas mientras las dejas secar. Cuando ya estén secas, guárdalas. Pero no las dejes mucho tiempo en bolsas de plástico (ni aunque te entregaran la bolsa en el momento de la compra) porque el tejido se puede deteriorar.