Después de Carnavales se ven más gargantas cubiertas. Las fiestas han dejado ronco a más de uno. Si te dispones a recuperar los pañuelos de seda natural que tengas en algún rincón del armario recuerda que la mejor manera de lavarlos pasa por poner en un barreño un litro de agua con una cucharada de sal, una de amoníaco y otra de detergente. Sumerge el pañuelo durante unos minutos y aclara inmediatamente con agua y sal. En el caso de manchas persistentes, frótalas con percloroetileno y vuelve a lavar de la forma anterior. Plánchalos húmedos. No puedes quitar las manchas en prendas de seda vertiendo jabón sobre ellas, porque penetra y se pone amarilla al plancharla. Prepara mejor un agua jabonosa, deshaciendo bien los polvos. El zumo de medio limón o un chorreón de vinagre añadido al último aclarado mantiene vivos los colores.