Solomillo reseco, escasez de entremeses en el bufé, esperas insufribles entre el primer y segundo plato, y barras libres que acaban antes de apurar la segunda copa. Son algunos de contratiempos que sufren algunas parejas y sus invitados durante el banquete de boda. En la mayoría de los casos se trata de incumplimientos contractuales por parte de las empresas de hostelería. Perjuicios para los contrayentes que muchas veces no son resarcidos porque no reclaman. De ahí la importancia de firmar de antemano un contrato escrito que especifique perfectamente los servicios y productos acordados.

Algunos matrimonios sí han logrado compensaciones económicas tras acudir a los tribunales. Uno de los últimos ejemplos es la sentencia dictada por el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Murcia. El juez obliga al establecimiento a ‘perdonar’ a los contrayentes parte del pago de su banquete de bodas porque el aire acondicionado del salón estaba estropeado. El magistrado recuerda que «constituye un grave incumplimiento contractual de la empresa que presta el servicio la ausencia de las debidas condiciones de climatización del local donde se celebra el banquete, si por su entidad impiden el disfrute natural de la ocasión», y exime a la pareja de abonar algo más de 4.000 euros que aún les quedaban por pagar de la cena del enlace.

Según explica la resolución, uno de los aparatos de aire acondicionado se averió el día del enlace y no fue reparado, «más bien rearmado en una sencilla operación». Por este motivo, recalca el juez, «se alcanzó durante el banquete una temperatura muy superior a la esperada» y «ni los novios ni los invitados pudieron disfrutar en tan señalado día lo que razonablemente podían esperar».

Este procedimiento se inició con la demanda del restaurante donde se celebró el banquete, que exigía a la pareja el cobro del total del banquete. Ésta había adelantado 8.600 euros de los cerca de 12.600 que costaba la celebración. La pareja se opuso alegando un incumplimiento del contrato y reclamando una indemnización por la defectuosa climatización del local. El letrado incluía una noticia del diario ‘La Verdad’ que informaba sobre las altas temperaturas que se alcanzaron ese día en Murcia -hasta 45 grados- y una pericial de un ingeniero industrial. Éste concluía que en el local se superaron los 27 grados lo que generó fatiga en los invitados.

La novia ya presentó, en septiembre de ese año, una denuncia ante la Consejería de Turismo por estos hechos. «Los invitados no pudieron siquiera terminar la cena, por el calor», relataba, «y los camareros servían sudando, algo bastante desagradable». La Administración regional le dio la razón e impuso al restaurante una sanción de 600 euros. El juez considera, ahora, que procede rebajar todo el montante que la pareja debía aún al local -algo más de 4.000 euros- en concepto de indemnización y daños morales. La resolución aún puede ser recurrida.

Reclamaciones en Extremadura

En Extremadura también se han registrado reclamaciones similares. El Juzgado de primera instancia número 3 de Badajoz dio la razón en 2009 a una pareja de novios que sufrió el ataque de una nube de mosquitos tigre cuando festejaban el banquete en el jardín de un restaurante de la capital pacense. En principio, el banquete debía celebrarse en el interior de un salón, pero ese día no funcionaba el aparato de aire acondicionado y la fiesta se trasladó al jardín por la vía de urgencia. Ahí comenzó la auténtico festín, pero para los mosquitos, que acribillaron a los novios y a los propios invitados. El magistrado de eximió a la pareja contratante del pago de los 7.000 euros que costaba el banquete.