Muy buena semana para los mercados de renta variable. La ligera caída del IPC americano hasta el 5 % supone un nivel muy compatible con los tipos actuales (aun estando lejos del objetivo del 2 %), mostrando un consenso casi unánime por parte de los miembros de la Fed de subir “solo” un 0´25 % el precio del dinero y mantener este nivel a lo largo de este ejercicio. Esta referencia, junto a otros datos macro publicados y los buenos los resultados empresariales, dieron confianza a los inversores, decantándose estos por las compras y logrando así las principales plazas bursátiles importantes ganancias.

De esta forma, las bolsas asiáticas cerraron con revalorizaciones superiores al 3 % y las europeas y americanas, lo hicieron en torno al 2 %.

Aquí, el Ibex fue uno de los índices donde los números verdes fueron más tímidos, terminando con un saldo positivo del 0´54%, cerrando en los 9.362 enteros.

El protagonista indiscutible de la semana fue Ferrovial que, tras una polémica junta de accionistas, se aprobó la operación de fusión inversa que permitirá a la compañía trasladar su sede social a los Países Bajos. Esta es una buena noticia para la constructora, ya que facilitará el acceso a inversores extranjeros al poder cotizar en Estados Unidos y Holanda, además de continuar en España.

Dos compañías ligadas al sector manufacturero lideraron los avances: Acerinox y Arcelor, cuyos títulos se revalorizaron un 4´78% y 4´70% respectivamente gracias a las expectativas de nuevos estímulos económicos en China.

En el mercado de deuda, subida en la rentabilidad del bono hasta situarlo en el 3´47%

Por su parte, el Tesoro adjudicó más de 12.000 millones a diferentes plazos, desde 6 meses hasta 20 años. La paradoja es que el interés es muy parecido entre ellos, con independencia del vencimiento: así la rentabilidad a seis meses es del 3%, mientras que a diez años es tan solo del 3´40%. Con esto, se permite al ahorrador más conservador obtener unos beneficios a corto plazo muy interesantes y así poder amortiguar la inflación actual con un riesgo prácticamente “cero”.

En los de divisas, el euro sigue recuperando posiciones con el dólar, marcando fixing ambas monedas en las 1´09 unidades y en los de cripto, el bitcoin superó los 30.000 dólares, cifra no vista desde junio del año pasado. Además, en los de petróleo, el barril de Brent estuvo muy cerca de máximos anuales, cerrando el viernes en los 86 dólares/barril.

El fin de las subidas de tipos de interés (que parecen estar llegando) y las buenas perspectivas de resultados empresariales para el segundo trimestre del año, hacen que podamos ver un fondo de mercado relativamente aceptable. Buen momento para los inversores. Va saliendo el sol.