Por Antonio Gilgado Había mujeres mayores, jóvenes, niñas, adolescentes. Universitarias, trabajadoras, sin estudios. Pocas concentraciones aglutinan a una población tan heterogénea como la que se celebró el pasado fin de semana en Badajoz. Se trataba de dar voz a aquellas que no la tienen porque algún miserable se ha empeñado en quedarla muda. En la […]