Ni el Faro parece indemne al desplome del consumo. Las penas no se limitan sólo a Menacho o los pequeños comerciantes de San Roque, las multinacionales también lloran y con la deriva que lleva la depresión económica, parece que más que dinero, hace falta imaginación para seducir a una clientela con los bolsillos vacíos. Promociones […]