Si todo marcha como debe, llegaré a Melilla a eso de las cuatro de la tarde. Hoy será un día largo, desde las siete de la mañana en pie y hasta la hora que esta noche acabe de enviar toda la información del primer partido de semis. Porque sí, señores, el Cáceres empieza a jugar hoy las semifinales por el ascenso a la ACB. Quién nos lo iba a decir hace unos meses, ¿verdad? En diciembre, cuando el equipo cayó de aquella manera tan fea en casa contra el Clínicas, o más adelante, cuando parecía casi imposible meterse en playoffs porque había que ganar los cuatro últimos partidos de liga y que los demás fallaran. Pero entonces habían llegado ya al equipo Francis y Sergio Olmos y, aunque Zengo se marchó al Canarias sin mirar atrás, algún resorte se movió en ese cerebro colectivo que parecen tener los equipos y aquel Cáceres que daba tan poco miedo se ha convertido ahora en un rival temible para cualquiera. Que se lo pregunten al Burgos.
Desconozco cuáles serán las sensaciones cuando el lunes viaje de regreso a Extremadura en este mismo tren — donde no sé si seguirán estos reposacabezas del Womad que os pongo en la foto–. En Melilla puede pasar este fin de semana cualquier cosa, desde el 1-1 con el que creo que ambos equipos se darían por satisfechos, hasta la decepción para el Cáceres de volverse a casa con un 2-0 o, y no quiero ni pensarlo porque me pongo nervioso, un 0-2 que desataría la locura el próximo viernes en el Multiusos. No hay certezas, no hay garantías, y menos en unos playoffs en los que el factor cancha está siendo importante pero en el que todos los equipos que lo llevaban en contra han tenido serias opciones de revertirlo, aunque al final solo lo haya logrado el Cáceres en la eliminatoria de cuartos.
Bueno, de momento lo dejó aquí a la espera de ver el panorama que nos encontraremos esta tarde en el hotel de concentración del equipo, donde por cierto ha coincidido con unos cuantos actores famosos que han ido a la Semana de Cine de Melilla. Ya andan por ahí circulando fotos de los jugadores con gente como Santiago Segura. Les vendrá bien para distraerse y rebajar la presion.