No levantan cabeza. Lastrada por todo un cúmulo de referencias adversas, muchas de ellas de gran peso, la renta variable ahonda en sus pérdidas. El fuerte ritmo de crecimiento que mantiene la economía estadounidense y algún dato micro puntual, son manifiestamente insuficientes para neutralizar noticias como la falta de acuerdo sobre el Brexit, el conflicto desatado a raíz del asesinato del periodista Saudí Khashoggi, las muestras de desaceleración en Europa y Asia, la decisión del BCE de acabar en diciembre su programa de compra de deuda, el rechazo de Bruselas a los presupuestos de Italia, la rebaja a este país de su rating por parte de Moody´s y S&P o ya en clave doméstica, la esperpéntica situación generada a raíz de la sentencia del TS, trasladando a las entidades financieras el pago del impuesto de Actos Jurídicos Documentados y la posterior -e insólita- decisión de este mismo Tribunal de someter al Pleno la interpretación y alcance de una resolución, que de aplicarse con la máxima retroactividad, podría costar al sector financiero español más de 40.000 millones de euros.

Así las cosas, el Ibex cerró por quinta semana consecutiva en rojo, perdiendo el selectivo 161 puntos (-1´82%) y arranca el lunes desde los 8.730 enteros. Descalabro para valores de segunda fila como Arcelor, Acerinox y Viscofan que cayeron respectivamente un 10´43%, 10´51% y 19´48%. Serio revés de nuevo para los bancos, dejándose Bankinter un 5´97% y Sabadell un 7´65%.

También retrocesos fuertes en el exterior, con recortes similares a los nuestros en Milán, Frankfurt, París y Nueva York y disparándose las caídas hasta el 6% en Tokio.

El temor a la desaceleración tuvo especial impacto en la cotización del barril de Brent, desplomándose un 4´41% hasta los 76$. Esto arrastró a Repsol cuyos títulos se dejaron un 5´68%. El enfriamiento económico de la UE también penalizó a nuestra divisa que siguió cediendo terreno con el dólar, cruzándose ambas monedas en las 1´13 unidades, mínimos de los últimos 12 meses.

Las únicas buenas noticias llegaron desde los mercados de deuda. El bono español, que el viernes anterior había cerrado en el 1´76% lo hizo este en el 1´58% (18 puntos básicos menos), rebajándose la prima de riesgo hasta los 124 enteros.

Ayer se celebró la segunda vuelta de las elecciones presidenciales brasileñas y como adelantaban todas las encuestas, el ultraderechista Jair Bolsonaro ganó por amplia mayoría. Teniendo en cuenta los muchísimos intereses que tienen en ese país empresas con tanta ponderación en el Ibex como Santander, Telefónica, Repsol o Iberdrola, la evolución de la segunda economía norteamericana tendrá una influencia decisiva en estas compañías. Habrá que estar atentos.