Si noviembre fue un mes perfecto para la renta variable -con subidas jugosísimas en todas las plazas- diciembre ha cerrado su primera semana con números verdes, tratando los inversores de consolidar las mejoras acumuladas y enfilar la recta final de un ejercicio que todo apunta acabará siendo de los más productivos de los últimos años.
El selectivo terminó el viernes en los 10.223 puntos, 81 enteros por encima de como lo hiciese siete días antes. El papel presionó con fuerza al sector financiero, que fue el que registró peor saldo, con Sabadell y Bankinter recibiendo el castigo más severo, dejándose un 8´57% el primero y 5´19% el segundo. La otra cara de la moneda la ofrecieron Grifols y Meliá, que se revalorizaron respectivamente un 9´45% la farmacéutica catalana y un 7´05% la cadena hotelera.
Fuera, comportamientos muy dispares. Mientras las principales plazas europeas cerraron con avances (París y Frankfurt superaron holgadamente el 2%), los tres principales índices estadounidenses se movieron de forma mucho más plana. Peor suerte corrió el Hang Seng chino que perdió un 3´01%, muy penalizado por los datos macro que se conocieron el jueves sobre la ralentización de la segunda economía mundial.
Si en los mercados bursátiles la semana fue de consolidación, en los de renta fija fue de ganancias, ganancias que se reflejaron en caídas de la rentabilidad por una mayor presión de las órdenes de compra. El bono a diez años bajó 7 puntos básicos, cayendo del 3´36% al 3´29%. El Tesoro aprovechó esta buena coyuntura para adjudicar 6.902 millones a distintos plazos, haciéndolo en todos ellos a tipos de interés más bajos que en la precedente subasta.
Semana grande para el bitcoin, que se apreció un 13´32% y acumula en lo que va de año una subida cercana al 150%, consolidándose la principal moneda virtual holgadamente por encima de los 40.000 dólares, máximos desde abril de 2022.
Muy mala dinámica la del barril de Brent en los mercados de crudo. El petróleo, que hace apenas tres semanas rozaba los 100 dólares, acabó el viernes cerca de sus mínimos anuales, buscando soporte en los 75$. Por su parte el cambio euro/dólar se fijó en las 1,074 unidades.
Ya están empezando a circular por las casas de bolsa, los resúmenes anuales con las previsiones de cara a 2024. Nosotros no vamos a ser menos. Aunque el actual ejercicio se va a saldar con una mejora superior al 20%, el grueso de los analistas ven aún recorrido a la bolsa española. Si como parece, la inflación se logra contener, el Ibex podría anotarse en el 24 ganancias cercanas a los dos dígitos. Hay incertidumbres… pero también hay mucha liquidez.