Un marzo sencillamente ESPECTACULAR. El Ibex subió el pasado mes un 10´73%, cerrando por encima de los 11.000 puntos (terminó en los 11.074, su nivel más alto de los últimos siete años) y finalizó el trimestre con una ganancia del 9´63%.
Nuestro indicador de referencia fue el índice europeo con mejor saldo y para ello se apoyó mayoritariamente en el sector financiero que colocó a casi todos sus valores en el vagón delantero, con mención especial para Mapfre e IAG que se revalorizaron en las cuatro sesiones hábiles de la semana un 8´03 y un 8´07% respectivamente, apoyada la aerolínea en la valoración positiva que realizaron los analistas de JP Morgan sobre la compañía.
Entre los pocos valores que se desmarcaron de la tendencia general alcista que registraron el grueso de cotizadas, la peor parte se la llevaron ACS (-4´15%) lastrada la constructora por la renegociación del contrato de concesión de su mayor autopista en Texas y CaixaBank que cedió un 5´17%, cerrando sus títulos en los 4´49 euros/acción.
La semana fue bastante plana en las principales plazas foráneas con el MIB de Milán y el Dax de Frankfurt ofreciendo su mejor cara, coqueteando ambas con sus máximos históricos. Buen comportamiento también de los índices estadounidenses, firmando el Standard & Poor’s su mejor arranque de ejercicio de los últimos cinco años.
Con muchos operadores haciendo las maletas para disfrutar de unos días de vacaciones, las variaciones en los mercados de deuda, divisas y materias primas fueron mínimas. En los de bonos, las obligaciones a diez años terminaron la semana ligeramente por encima de como lo hicieron el viernes anterior y con la prima de riesgo en los 86 puntos básicos. Por su parte, el fixing euro dólar tampoco registró oscilaciones importantes rondando el mismo las 1´08 unidades. El barril de Brent siguió con paso firme y su cotización se acerca ya a los 90 dólares, próximo a niveles pre-covid.
El activo “estrella” sigue siendo el Bitcoin. La criptodivisa rompió su techo y cotizó por primera vez por encima de los 70.000 dólares, triplicando en solo tres años su valor.
La renta variable acaba de cerrar un trimestre excepcional. Con una coyuntura macro compleja, el dinero no se ha amilanado. Lo dijimos a finales del pasado año: la bolsa estaba “barata” y ajustar sus precios al alza era solo cuestión de tiempo. Solo una cuestión de tiempo. El precio objetivo de la mayoría de los valores del Ibex -aun teniendo en cuenta las importantes mejoras de los últimos tres años- sigue ofreciendo un gran margen de mejora. El Ibex debería mirar por encima de los 12.500 puntos este mismo año. Ese es su próximo gran objetivo