Termina octubre con una de las semanas más difíciles para nuestro país tras el devastador efecto de la DANA y comienza noviembre con un alto en los mercados, después de un rally anual de subidas generalizadas.

El guion de las últimas jornadas lo ha marcado la presentación de las cuentas del tercer trimestre, acompañado de importantes datos macroeconómicos como el aumento del IPC en España (1,8% en octubre), Alemania (2% frente al 1,8%) y la zona euro, que repunta al 2%. El crecimiento de la economía obtuvo mejores datos, incrementándose al 0,4% el PIB europeo (doble que lo esperado) y al 0,8% en clave doméstica. Sin embargo, en Estados Unidos, no fueron tan buenos: el aumento de su economía se quedó en el 2,8% del 3% esperado. Por su parte, el informe de empleo fue peor que el mes anterior, pero manteniendo la tasa de paro.

Datos también en Asia: el Banco de Japón mantuvo sus tipos de interés ultrabajos en el 0,25% y su producción industrial (índice PMI) se incrementó en octubre.

El Ibex terminó su sesión del día de Todos los Santos con compras, viéndose reflejadas en la semanal, que se salvó de los números rojos con una escueta ganancia del 0,34%, a pesar de los buenos resultados presentados por sus cotizadas. Destacaron los de Fluidra, que sorprendió con un beneficio de un 14% más, revalorizándose un 10,92%, los de la gran banca española, con Unicaja como la financiera con mayor resultado (un 58% más) anotándose un 10,17% en la semana y los de Puig (+7,73%), que ganó casi un 10% más en el trimestre. En el lado negativo, Acerinox redujo sus cuentas a la mitad debido a la huelga de su planta en Cádiz (-5,47%) y Enagás y Colonial, que cayeron un 4,86% y 4,70 % respectivamente.

Fuera, las bolsas terminaron en terreno negativo, destacando las ventas en Wall Street, lastrado el Nasdaq por varias tecnológicas (como Apple y Microsoft) a pesar de los buenos números de Amazon, que subió un 6% el viernes. Europa se contagió de esta tendencia, con caídas en el Dax de Alemania (-1,09%) y el Cac de París (-1,18%).

Toda esta avalancha de datos afectó al resto de los mercados. Para los de deuda, ganancias en la rentabilidad del bono español a 10 años y su homólogo alemán. En los de divisas, el fixing euro/dólar terminó en las 1,08 unidades y el bitcoin rebota con fuerza por el “efecto Trump”. Por último, en el mercado de materias primas el barril de Brent cayó por encima del 3%.

Después de una semana de aluvión de resultados empresariales y macroeconómicos, falta uno de los más esperados de este 2024: la decisión de los americanos de su nuevo gobierno. Estaremos pendientes.