El periodo navideño ha propiciado el parón más prolongado del año en las bolsas europeas, reduciendo su actividad a apenas dos jornadas y media.
Tras los numerosos datos macro conocidos la semana pasada, esta solo cabe destacar la publicación del PIB de España, Estados Unidos y Reino Unido. En el caso del nuestro, la economía creció el tercer trimestre un 0,6%, una décima menos que el anterior debido al mal comportamiento del sector exterior; el británico, confirmó la estimación inicial con un incremento del 0,1% y el estadounidense, superó expectativas y aumentó un 1,1%, hasta el 4,3% en tasa interanual.
El Ibex terminó prácticamente plano en los 17.172 puntos, pero manteniéndose en zona de máximos. Entre las compañías que más se revalorizaron se situó Solaria: la energética recuperó un 3,06%, impulsada por el nuevo plan estratégico de inversiones en tecnología, por valor de 2.500 millones de euros, que llevará a cabo entre 2026 y 2028. Las pérdidas en el parqué las protagonizó Sabadell. Las acciones de la entidad catalana se vieron perjudicadas por el descuento del dividendo que abonará el próximo lunes y finalizaron con un balance negativo del 2,05%.
En el exterior, los principales índices europeos registraron pocos movimientos, destacando la subida del 0,21% del DAX de Frankfurt y la caída del 0,59% del CAC de París. Por su parte, las compras se impusieron en Asia y Estados Unidos, con el Nikkei repuntando un 2,5% y el S&P más de un 1%.
En los mercados de deuda, las rentabilidades de los bonos español y alemán retrocedieron al 3,29 y 2,86% respectivamente, mientras la del estadounidense se mantuvo en el 4,15%. En los de divisas, el euro amplió su escalada y se aproxima cada vez más a las 1,18 unidades frente al dólar. Las amenazas de Trump a Venezuela y el aumento de las tensiones geopolíticas, impulsaron tanto la cotización del petróleo como la del oro, superando el barril de Brent los 61 dólares y marcando el oro nuevos máximos, encaminándose a cerrar su mejor año desde 1979. Por último, el bitcoin en los de cripto, continuó en el entorno de los 87.000 dólares, acercándose cada vez más a finalizar su primer ejercicio con caídas desde 2022.
La imposición por parte de China de aranceles hasta el 42,7% a determinados productos lácteos europeos, como represalia a Bruselas por las tarifas a los vehículos eléctricos chinos, está provocando incertidumbre sobre las empresas agroalimentarias de la UE y aumenta el riesgo de una escalada en la guerra comercial entre ambas potencias. Esperemos que las dos partes reconduzcan el diálogo para evitar un conflicto perjudicial para un sector cuyo impacto se sentiría con especial fuerza entre los productores españoles.