El anuncio de Trump el pasado martes de incrementar al 50% los aranceles a Canadá, como respuesta del impuesto que Ontario quiere imponer a la electricidad que exporta a EE.UU., fue el comienzo de otro nuevo “culebrón” arancelario. Aunque finalmente ambos países decidieron dar marcha atrás y no llevar a cabo estas amenazas, el gravamen del 25% que la Casa Blanca aplicó el miércoles a todo el acero y el aluminio canadiense y europeo, obtuvo una rápida represalia comercial por parte de ambos, con imposiciones de tasas sobre los productos estadounidense por valor de 26.000 millones de euros y 19.000 millones de dólares respectivamente. Las contramedidas del presidente republicano el jueves, no se hicieron esperar lanzando de tarifas del 200% al vino y a las bebidas alcohólicas europeas.
Todos estas amenazas, junto con la negativa de Rusia a firmar la tregua de un mes propuesta por Ucrania y Estados Unidos, a pesar del acuerdo histórico alcanzado por el Gobierno alemán, inclinó el balance semanal hacia el lado negativo. Las pérdidas en Wall Street rondaron el 3% (aunque el dato del IPC fue mejor del esperado) al verse penalizados sus principales índices por las declaraciones en las que Trump no descartaba una posible recesión, que posteriormente negó indicando que no veía peligro a corto plazo. El Ibex -el peor entre sus homólogos europeos- finalizó con una caída del 1,90% hasta los 13.005 puntos. Entre las cotizadas más penalizadas se encontraron Inditex (-11,05%) e IAG (-11,48%). Las desfavorables previsiones de ventas del primer trimestre presentadas por la textil gallega pesaron más que los beneficios históricos obtenidos en 2024, lastrando sus acciones hasta los 44,85 euros. Mientras, la aerolínea se vio arrastrada por el desplome de Delta Air Lines tras el profit warning lanzado por la compañía estadounidense.
Mucha tensión en los mercados de renta fija, aunque el bono español a 10 años apenas registró cambios significativos y cerró en el 3,5%; en los de divisas el euro mantuvo su fortaleza frente al billete verde y llegó a superar en muchos momentos de la semana las 1,09 unidades; en los de commodities nuevos récords del oro al alcanzar intradía los 3.000 dólares y sin cambios en los de petróleo. En los de cripto, nuevo descalabro del bitcoin, que cayó cerca de un 2%.
La subida del IPC español hasta el 3%, unido a las novedades arancelarias y al aviso del Banco de España sobre los riesgos para el crecimiento económico, complica aún más si cabe el panorama bursátil a corto plazo.