Escampa. Después de un final de ejercicio verdaderamente complicado, con desplomes de los principales índices mundiales en torno al 15%, en este arranque de 2019 los ahorradores parecen estar más tranquilos.
Cuatro noticias han sido determinantes para este súbito cambio de tendencia: la primera de ellas, el nuevo giro en la disputa comercial entre China y EE.UU. , disputa que podría saldarse finalmente con un acuerdo beneficioso para las dos partes antes del 1 de marzo, fecha en que expira la tregua que acordaron ambas potencias. La segunda, el mensaje “dovish” de la FED moderando sus expectativas sobre nuevas subidas de tipos de interés en 2019; en tercer lugar, también contribuyó a que el dinero entrase con fuerza la mejora de precios objetivos que recibieron -de distintas casas de análisis- algunos de los valores con más peso en el Ibex y finalmente, mucho que ver con este rally alcista de inicio de año tiene el descuento al que cotizan un buen número de acciones, tras el descalabro de un 2018 ciertamente agónico.
Así las cosas, las compras se impusieron en todas las plazas, anotándose avances en torno al 1´5% en Frankfurt, Londres y París, cercanas al 2% en Nueva York y superiores al 4% en Tokio y Hong Kong.
Centrándonos en Madrid, el grueso de compañías cerraron la semana en verde, sobresaliendo las ganancias que se anotaron Técnicas Reunidas, Colonial y Mediaset (4´57, 5 y 8% respectivamente). La nota negativa vino de la mano Bankinter, que se dejó un 4´39%.
Esta primavera saldrá a bolsa Ibercaja, grupo en el que se integró Caja Badajoz. Noveno banco español por activos, tiene más de 1.000 sucursales y una plantilla de 5.200 empleados. Tiempo habrá para analizar esta operación.
El optimismo de la renta variable contagió a los mercados de deuda, cayendo la rentabilidad del bono a diez años del 1´48 al 1´45%, con la prima de riesgo en los 127 p.b.
Las mejores perspectivas globales dispararon la cotización del barril de Brent, que se revalorizó un 6´73%, terminando por encima de los 60 $; por su parte en los de divisas el euro se fortaleció en su cambio con el dólar hasta marcar fixing muy cerca de las 1´15 unidades, nivel que perdió el pasado mes de septiembre.
El sentimiento de los inversores ha cambiado. Del temor a una recesión se ha pasado a descontar una fuerte desaceleración y de ser así, se confía en que la misma pueda ser reconducida tanto por los principales bancos centrales como por las políticas económicas que marquen los Gobiernos. Pero no debemos olvidar que la tímida recuperación de estas dos últimas semanas está “cogida con alfileres”, toda precaución que sigamos tomando será poca. Tenemos -TODOS- que aprender de los errores cometidos al inicio de esta crisis. Si no lo hacemos volveremos a la casilla de salida… otra vez.