Los bancos centrales están decididos a poner todo lo que está de su parte para contribuir a frenar una escalada de precios que se ha convertido en el mayor reto que tienen ante sí las principales economías mundiales. De hecho, Christine Lagarde, tras el Consejo del BCE el pasado jueves, advirtió del largo camino por recorrer para minimizar los efectos de una recesión que ya todos dan por segura en el parqué, aunque la duración de esta contracción se espera que sea corta y tenga un efecto reducido en el empleo. Los inversores se apresuraron a soltar papel en los mercados bursátiles, pero sobre todo en los de deuda. Las rentabilidades tanto del bono alemán como del español se dispararon hasta niveles máximos de los últimos 7 años, yéndose el primero hasta el 2´15%, mientras el segundo rompía la barrera del 3%, disparándose hasta el 3´24%. De esta tendencia se desmarcó el estadounidense, cuya rentabilidad se acercó mucho al nuestro, cuando hace apenas unos meses el diferencial entre ambos superaba los 150 puntos básicos.
Los mensajes desalentadores lanzados por los bancos centrales quebraron de raíz el rally alcista que las bolsas habían iniciado en septiembre y en una semana muy negativa, el Ibex se dejó un 2´13%, logrando al menos mantener con solvencia el soporte de los 8.000 enteros. Las compañías más penalizadas fueron ArcelorMittal y Melia que se dejaron un 7´34% la metalúrgica y 10´16% la hotelera. Paradójicamente, el sector con mejor comportamiento fue el bancario, con mención especial para Bankinter y CaixaBank que se revalorizaron un 5´07% y 7´32% respectivamente.
Más revueltas aún bajaron las aguas fuera y los recortes tanto en Paris como en Frankfurt rondaron el 3%.
El Tesoro celebró el martes la última subasta del año, adjudicando algo más de 1.000 millones de euros en letras a 3 y 9 meses.
La amenaza rusa de reducir la producción de crudo en represalia al límite de precios a sus exportaciones establecido por la mayoría de países occidentales, disparó al barril de Brent cerca de los 80 dólares. Muchos menos cambios en los mercados de divisas, marcando fixing el euro con el dólar en las 1´06 unidades, y diferencias muy cortas también en los de criptos, con el Bitcoin muy cerca de sus mínimos anuales.
Mañana, Logista sustituirá a PharmaMar en el Ibex. Además, Siemens Gamesa ha dejado también el selectivo tras 22 años ininterrumpidos… aunque podría volver a reincorporarse el próximo 27 de diciembre cuando se conozcan los resultados de la OPA que le ha lanzado su matriz Siemens Energy. Si no volviese a cotizar la multinacional española, los candidatos a sustituirla son Cie Automotive, Vidrala y Viscofan. Tres clásicos.