Está visto que cada uno lucha con lo que tiene. Y si se trata de luchar por el Carnaval, no se puede hacer de otra forma que a ritmo de los tambores de sus comparsas. Y ayer sonaron, y mucho, desde la Plaza de España, donde estaban convocados todos los manifestantes, hasta la Delegación del Gobierno donde terminó la protesta.
Unas 2.000 personas, entre comparseros, murgueros y gente de la calle, se dieron cita allí para apoyar que el domingo día 2 de Marzo las tiendas de la ciudad no abran y se pueda celebrar el desfile como todos los años.
Comparsas uniformadas con camisetas, carteles, pancartas, silbatos y gente disfrazada se agolpaban detrás de la cabecera de la manifestación donde se podía leer, ¡Por Badajoz, por nuestro Carnaval!
La manifestación transcurrió lenta pero tranquila hasta llegar a la Delegación del Gobierno donde se leyó el manifiesto. El encargado fue Eduardo Fernández, miembro de la comparsa Vendaval. Él mismo anunció que habían recibido una llamada del Concejal de Festejos donde les anunció que los comercios flexibilizarían los horarios a los comparseros que se viesen afectados por tener que trabajar el día 2 de marzo. Pero no les dijeron nada sobre las propuestas que habían hecho los miembros de las comparsas de modificar horarios de desfile y apertura de comercios para no coincidir.
El concejal había estado reunido con los responsables de los principales comercios de la ciudad y con el responsable de comercio de la Junta para poder llegar a un acuerdo y solucionar este problema.
Aún queda tiempo y esperemos que tanto carnavaleros como comerciantes puedan limar asperezas y llegar a un acuerdo para que todos estén satisfechos. Pero, sobre todo, para que una fiesta por la que se ha luchado tanto para que sea de Interés Turístico Nacional no se vea afectada. Porque todo esto puede hacer que se resienta y eso no beneficiaría a nadie tampoco.