EL PARQUE DE LOS CACHONES ES UN LODAZAL CUANDO LLUEVE
Me lleva esta singladura por el singular Parque de los Cachones dela Capital placentina, que sirve de conexión con el paseo fluvial y el nuevo paseo sobre el Arroyo Niebla, senda peatonal recientemente abierta; todos ellos para el disfrute del ciudadano.
Estas obras fueron realizadas porla Confederación Hidrográfica del Tajo y proyectadas hace más de 15 años en anteriores Gobiernos municipales.
El Parque de los Cachones fue el primero en ser recibido por el Ayuntamiento dela Capital placentina y, si mi memoria no me falla, en el Gobierno del Alcalde José Luis Díaz.
Pues bien, desde que se hizo cargo de él el Ayuntamiento, existen deficiencias de calado no detectadas por los Técnicos municipales, una vez realizada las obras de transformación en parque. Estas deficiencias consisten en el drenaje del mismo; cada vez que llueve por poco que sea, y en verano simplemente con el riego, se encharca totalmente y en los senderos se forman balsas de agua que lo hacen intransitable, dejándolo fuera de uso para el ciudadano.
La dejadez del Ayuntamiento para solucionar este pequeño problema es persistente y muy poco efectiva para un problema de tan poco costo. Pero esta es la triste realidad.
El aumento de personas que lo cruzan, para pasar del paseo fluvial y desde la Isla al paseo sobre el Arroyo Niebla, es numeroso y se ha incrementado en estos últimos meses desde que lleva abierto este último.
La ineficacia municipal en este aspecto no queda solo en el drenaje del parque, la pasarela de comunicación con el Barrio de San Juan se encuentra sin iluminación desde hace la “intemerata”, por no decir meses o años. Y eso que lleva una iluminación adosada a la pasarela, pero nadie se preocupa de reponer las lámparas o arreglar la avería, dificultando a los paseantes por la penumbra en que tienen que transitar y aumentando su inseguridad.
Si a esto añadimos que el paseo fluvial, desde esta pasarela hasta el Puente Nuevo, tiene todas las farolas fundidas, desmochadas, no pudiendo cumplir la función para la que fueron instaladas, es aún más penoso. Y el Ayuntamiento es incapaz de poner pie en pared al vandalismo que se produce al destrozar estas luminarias y por tanto dejando a estos vándalos en total impunidad, impidiendo que el ciudadano pueda pasear por este paseo fluvial a ciertas horas.
Estas pequeñas deficiencias, de poco coste de mantenimiento, hacen que el ciudadano piense, y con razón, que sus gobernantes no se preocupan de dar solución a sus problemas cotidianos, domésticos si se quiere, pero que dificultan la actividad de ocio y recreo a la que tienen todo el derecho.
No invento nada, está a la vista de todos y que desde mi Cofa he podido detectar todas estas pequeñas anomalías que, si son subsanadas, facilitan al ciudadano una mejor calidad de vida dado que son muchas las personas de todas las edades y niños que frecuentan este parque y paseos.
El Concejal de Parques y Jardines debe implicarse más en la detección de estos problemas y subsanar las deficiencias, que por ser pequeñas no dejan de incomodar al ciudadano, que ve cómo paga sus impuestos y no lo ve reflejado en los servicios que se tienen que prestar a la comunidad a través del Ayuntamiento. Denota más bien la apatía y el poco interés del político en el gobierno. Mucho pedir el voto en campaña electoral prometiendo soluciones, pero luego, a la hora de la verdad, cuando toman posesión se olvidan de los votantes.
Los ciudadanos, que no súbditos de estos gobernantes, exigimos no solo que sean eficientes en la solución de los problemas cotidianos, sino atajarlos con prontitud para no dar sensación de abandono y dejadez. Y que no nos digan que hay falta de educación y respeto con el tratamiento del mobiliario urbano y que el vandalismo hace estragos. Miren, para eso les hemos votado, para que solucionen el vandalismo si lo hay y pongan los servicios de luz y drenaje a funcionar.
De esta forma, con eficacia y rapidez, se demuestra que se gobierna bien; que es lo que esperamos los ciudadanos de nuestros representantes.