Es un organismo de origen anglosajón, casi impuesto por la UE que no se creía de ningún gobierno español las cuentas públicas.La prueba, hace pocos días enmienda las previsiones de deficit del Gobierno estableciendo un mínimo de 4.1%.
Y cuando oímos que la Airef pide que se refuercen los sistemas de control de cuentas de la Administración Central y la Seguridad Social o que ha valorado la actualización del Programa de Estabilidad 16-19, lo que hace es controlar que lo que nos cuentan es verdad.
Pero ¿que es la Airef? ¿quiénes son? ¿quiénes los ponen ahí?. ¿dependen del Gobierno? ¿es otro Ministerio de Economía? ¿lo controla la oposición política? Son multitud de preguntas que se nos presentan cuando oímos en las noticias “El informe de la AIRef dice que…”..
Es un organismo independiente del Gobierno creado en 2013, que controla o, al menos, lo intenta, las finanzas de España y si estas se están gestionando adecuadamente para asegurar la sostenibilidad de los servicios públicos.
Este organismo no es nuevo, lleva funcionando en otros países europeos desde 1947, aunque resulta poco conocido para nosotros.
Sirve para controlar la acción financiera del Gobierno y de los Gobiernos Autonómicos entre otros organismos públicos de una manera independiente, transparente y rindiendo cuentas.
Emite Opiniones y Estudios de los presupuestos de las Administraciones Publicas para prever que no gasten más de lo que pueden, porque una gestión indeseable de esos organismos podría llevarnos a poner en riesgo que el sector publico fuera insostenible, y en países como Grecia, ya saben qué sucede cuando cae financieramente el sector publico.
Su presidencia lo es por 6 años, lo cual casi garantiza que, al menos, dos gobiernos sean fiscalizados por ellos. Si además se produce alternancia entre los gobiernos, razón de más para una mayor independencia y, además, no puede ser reelegido cuando vence el mandato.
No tiene consejo de administración, ni cuotas políticas, ni sistemas cremallera. Manda su presidente, elegido de entre profesionales altamente cualificados en el análisis y la gestión de cuentas públicas, y asume la fiscalización de las cuentas publicas.
La experiencia griega que engañaba constantemente a los responsables económicos europeos hasta su total colapso financiero, hizo que se “recomendara” a España crear este organismo para dar mayor credibilidad al control de las cuentas públicas y el déficit.
Viene a ser como la Oficina Presupuestaria de EEUU, y su importancia radica en que es un organismo independiente que avisa y anticipa problemas futuros para que los gobiernos puedan actuar sobre ellos antes de que sean una realidad.
No obligan legalmente a su cumplimiento, pero sí que obligan a la Administración Pública sobre la que informan la desviación a cumplir las recomendaciones, y si no, a justificar por qué razón no lo hacen.
Y si no las cumplen, no hay sanciones, ni son vinculantes pero como el principal criterio es el de la transparencia, en su portal la AIRef “cuelga” el informe completo para que los ciudadanos valoren con qué gestores económicos se están casando con su voto. Eso conlleva que automáticamente los medios de comunicación se vuelquen en dar voz a las desviaciones de las Administraciones Publicas.
Como ejemplo, mientras el Gobierno hace un par de meses nos decía que el déficit publico bajaría al 2.8% en el 16 y al 2.9% en 20,17 haciendo que lanzaran las campanas al vuelo los más optimistas, ayer la AIRef nos contaba en su informe que del 4.1% no bajará, y podrá llegar al 4.7%. Ahora el Gobierno tendrá que justificar de nuevo sus números para evitar que pensáramos que eran fuegos de artificio destinado a tertulianos económicos crédulos.
Así que cuando vuelvas a oír que la AIRef emite un informe, piensa que es para controlar la Administración Pública desde un punto de vista independiente, y dedicada casi en exclusiva a evitar que el Sector Público desmande sus cuentas porque como ya sabes, si estas se van de madre, tú pagas, y como siempre decimos, lo que no son cuentas… son cuentos.