La sociedad está cambiando con esta crisis, y con ello los hábitos de consumo y de gasto. Con el objetivo de ahorrar gastos, han surgido multitud de estrategias “colaborativas”, cuyo principal fin es la búsqueda de financiación, de ahorros de costes en tu día a día. La economía colaborativa puede convertirse en una opción de ahorro para tus finanzas, tu transporte e incluso tu vivienda de verano. La idea es abrir un mundo de posibilidades y soluciones de todo tipo entre los consumidores con economía colaborativa, una solución para ahorrar de la que te puedes beneficiar.
¿En qué sectores puede aprovecharse las ventjas de la economía colaborativa? Pues practicamente en todos aquellas actividades que requieren un gasto económico, y que son susceptibles de ser compartidas con otras personas.
En este blog ya hemos hablado de la actividad colaborativa en finanzas, que te permite eneficiarte como receptor de fondos para tus proyectos empresariales, o como inversionista dispuesto a conseguir una rentabilidad.
Los bajos tipos de interés que dan los bancos por sus depósitos, así como la necesidad de rentabilizar al máximo el dinero destinado al ahorro ha abierto a través del crowdfunding una vía sencilla y rápida para conseguir financiación a tu proyecto empresarial con un pull de inversiones. Asímismo, tú puedes ser inversionista ya que puedes invertir consiguiendo rentabilidades entre el 5% y el10% participando durante un tiempo como inversionista en los negocios de otros, o bien incluso en las necesidades de descuento de medios de pago de empresas suficientemente solventes.
Quiéen no ha ido a una fiesta, y a la pregunta inmediata de “qué me pongo” ha seguido ese paseo por las zonas comerciales seguido de una expresión bien explícita sobre los precios a gastar por un solo día: “qué barbaridad, para una sola noche”. Y cómo no, el siguiente paso ha sido preguntar a las amigas qué trajes tienen y le pueden prestar. Pues ya existe esa posibilidad a través de plataformas destinadas a la compra-venta e intercambio de ropa porque hay moda colaborativa. Así que para esa próxima boda serás la invitada mejor vestida y probablemente a mejor precio.
Inventado hace mucho por compañeros de trabajos situado a distancias grandes de tu domicilio, todos conocemos su sistema. En “intercambiadores” por todos conocidos, se queda para compartir diaria o semanalmente el coche para ir al trabajo. El siguiente paso se ha dado, no sin polémica, por parte de los profesionales del transporte, pero cuan tsunami, es imparable el número de plataformas destinadas a compartir coche no solo en trayectos de trabajo, sino en viajes de medias y largas distancias.
El sistema es sencillo. Yo me voy a tu casa y tú a la mía. El sistema funciona
porque la posibilidad de poder estudiar idiomas con tus hijos, o pasar unas vacaciones inolvidables se multiplica sin gastar mucho dinero.
Poco a poco la economía colaborativa irá imponiéndose en todos los sectores por razones de ahorro. Compartir viviendas; comidas que, hechas para una sola persona, son antieconómicas…. en definitiva, todo aquello que se pueda compartir y conseguir economías de producción, irán entrando en el ranking de Economía colaborativa, una solución para ahorrar porque ya sabes que lo que no son cuentas son cuentos.