Una de las cosas más importantes a la hora de empezar a correr, es adquirir el hábito de atarte los cordones y salir a correr. Pero la verdadera dificultad reside en ser constantes y mantener ese hábito en el tiempo. Es cierto que a veces hay que hacerlo rápido y salir sin pensar, ni valorar otras alternativas como la de quedarte en el sofá.
Mantener esa motivación será la clave, tanto para empezar como para ir mejorando. Pero esto del deporte moderno está cada vez más ajustado, es mínima la diferencia entre los competidores y cualquier ayuda cuenta para superar una marca, lograr un mejor tiempo o incluso ganar una carrera.
Los atletas recurren a todo tipo de ayudas para superarse, pero no te asustes, esto no trata de sustancias prohibidas, te cuento algunas ideas para lograr ese empuje extra en tus entrenamientos y mantener la chispa del primer día.
Correr entre gente. Correr con gente es algo que motiva. Por eso muchas veces cuando empezamos nos gusta sentirnos parte de un grupo de corredores, eso nos ayuda y nos obliga. Mientras entrenamos vamos hablando y sin querer aumentamos los ritmos sin darnos cuenta. Lo mejor es rodearte de gente de nivel parecido al tuyo o incluso un poco superior, eso te ayudará a mejorar.
Entrena solo. Igual que correr con gente es motivador, lo mismo pasa al ir solos. Nos sentimos únicos mientras corremos y nos concentramos sólo en eso. Sin nadie que nos distraiga, a veces esa soledad también se disfruta. Además, dicen que no serás un buen corredor si no sabes correr en solitario.
Escuchar música. Está comprobado que la música influye en nuestro estado de ánimo. Utilízala de manera adecuada, busca canciones alegres, que te den fuerza. Prueba con música muy marcada, yo a veces utilizo salsa para tiradas largas y algo más heavy para rodajes rápidos, pero cualquier otra también te puede servir. Canta y baila mientras corres. Deja volar tu imaginación y siéntete Rocky subiendo la escalinata del Museo de Arte de Filadelfia.
Apúntate a una carrera. Cada fin de semana cada vez hay más competiciones, no tienes excusa. Apúntate y participa en alguna de estas pruebas y entrena las semanas previas con ese objetivo. Planificar tus entrenamientos con una meta clara en la mente es fundamental para mejorar y mantener la motivación.
Fija metas intermedias. Afronta los entrenamiento fijando metas intermedias que puedas ir superando a lo largo de la sesión.
Corre rápido. Como dice Gomez Noya, no se sufre más cuanto más distancia recorres, si no cuanto más rápido lo haces. Experimenta subir el ritmo de manera progresiva y controlada. Prueba con series cortas de menos a más. Puedes ayudarte en zonas favorables o con el viento a favor. Correr rápido motiva.
Un café, por favor. Un buen café ataca directamente a nuestro ánimo, levantándolo al instante. Puede que eso nos de ese plus que necesitamos para atarnos los cordones y salir a quemar suela, pero por si acaso no te lo tomes sentado en el sofá.