El síndrome de Hecatón | El rincón del Zurdo - Blogs hoy.es >

Blogs

El Zurdo

El rincón del Zurdo

El síndrome de Hecatón

Si algo está evidenciando esta crisis es que la política actúa como sierva de la economía, de la religión del capital, que prima la mercancía sobre el hombre. No es algo nuevo, desde hace demasiado tiempo nuestra civilización padece lo que el filósofo francés libertario Michel Onfray llama “síndrome de Hecatón”.

Hecatón de Rodas fue un filósofo estoico del siglo II antes de Cristo. Enseñaba que, entre la salvación de otro hombre y la conservación del interés propio, debe optarse siempre por lo segundo. Y ponía ejemplos. En caso de escasez, ¿el amo debe alimentar ante todo a sus esclavos, a riesgo de poner en peligro sus ingresos, medios de producción y bienes? ¿O debe hacer lo contrario? Si, por ventura, uno se halla en un barco a punto de hundirse debido al exceso de carga y se ve forzado a elegir entre sacrificar su caballo de raza o un esclavo de poco valor, ¿qué debe arrojar por la borda? Hecatón responde que hay que preferir el interés personal frente al de la humanidad y el esclavo al pan y el agua, antes de lanzarlo por la borda en el siguiente viaje. Y en los tiempos de escasez que vivimos, nuestros amos están siguiendo a rajatabla el consejo de Hecatón, simiente del liberalismo económico; pues antes que Adam Smith y Bernard Mandeville y su ‘Fábula de las abejas’, Hecatón sostenía que “las fortunas privadas de los individuos constituyen la riqueza del Estado”.

Onfray explica que el síndrome de Hecatón afecta a los que entienden la economía como la ciencia de los bienes y las riquezas y la practican como una actividad independiente que puede desarrollarse a pesar de los hombres, incluso contra ellos y su bienestar. Y así es en nuestra sociedad capitalista, perfectamente civilizada, en la que prima el tener sobre el ser; el dinero es lo primero y luego todo lo demás, o nada más. El dinero abre las puertas del paraíso y del purgatorio capitalistas y quien no lo tiene penará en el infierno. El capital ha encontrado un instrumento de dominación mejor que una prohibición o una negación: la obligación de comprar, de satisfacer un impuesto, de pagar. Quien paga puede sobrevivir, incluso vivir: puede comer, beber, dormir bajo techo, tener derecho a la educación, la salud y una pensión y hasta una sepultura digna. Quien no puede pagar es excluido, está condenado. Y quien no quiere ser un condenado admite ser explotado por un salario de miseria que le permita comprar y pagar. Por eso, como sostiene Onfray, la escasez de trabajo es mantenida con toda intención por quienes sacan provecho de ella, para quienes es un regalo tener a su alcance una reserva de mano de obra más dispuesta a aceptar cualquier cosa.
Onfray advierte que el síndrome de Hecatón muestra que lo esencial de una civilización se funda en un sacrificio y su permanencia se asegura mediante un holocausto que se reitera sin cesar. Las víctimas son todos aquellos que el sistema de producción destruye, los réprobos y condenados: sintecho, ancianos, locos, enfermos, delincuentes, inmigrantes sin papeles, parados, trabajadores temporales o interinos… En definitiva, pobres, que “se irán empobreciendo en la medida que los ricos se enriquezcan”.

(Publicado en el diario HOY el 6/1/2013)

Temas

blog personal del periodista Antonio Chacón Felipe

Sobre el autor


enero 2013
MTWTFSS
 123456
78910111213
14151617181920
21222324252627
28293031