Mohamed VI no trata a la democracia mejor que Nicolás Maduro. Sin embargo, nuestros próceres consienten al rey de Marruecos lo que no consienten al presidente de Venezuela. Porque su majestad es un hijo de puta pero es nuestro hijo de puta, y el caricaturesco epígono de Hugo Chávez es el hijo de puta de Podemos.
El monarca marroquí cumple para España y Europa entera la misma función que el sultán turco Erdogan. Hacen el trabajo sucio de defender nuestras fronteras de la invasión de los bárbaros, aunque estos sean unos muertos de hambre que esgrimen como única arma el sueño de alcanzar el paraíso europeo para ganarse la vida que le han negado en su tierra. Mas nuestro bienestar depende de su malestar y los recibimos con la misma animosidad que los borricos y ‘borrokas’ a los turistas en Barcelona y San Sebastián. Claro, no hay sitio para ellos en un país de viejos como España, con comarcas con menos densidad de población que el Sáhara y una hucha de las pensiones que es un saco roto.
Por esta razón de Estado, el Gobierno de Rajoy y sus voceros mediáticos ignoran las protestas sociales en el Rif, pese a que el déspota ‘ilustrado’ alauí se las gasta con quien se le opone de la misma manera que el bolivariano aprendiz de Napoleón, el cerdo estalinista que protagoniza ‘Rebelión en la granja’ de George Orwell.
La población del Rif, región del norte de Marruecos, se levantó el 28 de octubre. El detonante fue la muerte del joven Mohssine Fikri, un vendedor de pescado aplastado por la trituradora del camión de la basura cuando trataba de recuperar el género que la policía le había confiscado. Desde entonces, los rifeños, agrupados en el movimiento popular Hirak, no han cesado de manifestarse contra la precariedad, la corrupción y la desigualdad, así como para exigir la liberación de los activistas encarcelados, una universidad, un hospital y la desmilitarización de la colonia española hasta 1956. Amnistía Internacional ha denunciado que al menos 66 de los más de 200 detenidos a causa de las revueltas fueron torturados. El miércoles fue enterrado Imad Attabi, un joven en coma desde que fue herido en la cabeza durante la represión policial de la manifestación del 20 de julio en Alhucemas. ¿Abrió algún telediario o periódico español con ello? Calla, calla, que no estamos hablando de Venezuela. De lo que no se habla no existe.
(Publicado en el diario HOY el 13 de agosto de 2017)