El 10 de octubre, Cataluña y España entera se asomaron al abismo a través de los ojos de Carles Puigdemont. El president subió al precipicio del Parlament, estiró una pierna, la dejó en suspenso en el aire, la retiró tras unos segundos eternos y tendió una mano de hierro en guante de terciopelo a Mariano […]