APORREAN LA PUERTA, se incorpora de un brinco, abre. Placa en las narices, Policía, queda detenido. ¿Por? Daños en el ascensor de la comunidad, anoche, borrachera colosal, orinó en los pulsadores. ¿En los pulsadores yo?, ¡ni borracho llego! Está en las cámaras de seguridad y orinalística confirma que el fluido es suyo, no se resista, Smith. ¡Pero si yo me llamo Manzaneque! Despierta sudoroso. En la tele, el enésimo capítulo de C.S.I. Cuando cree que ya puede suspirar aliviado, descubre que no sufre una pesadilla: la realidad está dentro del televisor y a él le ha tocado ser el malo de este capítulo.