LA FUNCIONARIA QUE AÚN CONSERVA el espíritu navideño convence al jefe para ponerle luces a un pinsapo enano plantado a la entrada. A mediados de diciembre, el servicio de mantenimiento cumple la orden instalando dos tiras de luces multicolores, pero faltan las pilas. Se hunde la tierra a los pies del sistema: el suministro de fungibles está externalizado, ábrase incidencia y dese traslado a la empresa adjudicataria, que a fin de año se pone manos a la obra, las dos únicas manos que quedan de retén en Navidad: «No me da la vida», se queja el peón. El jefe externalizado determina prioridades y va posponiendo lo de las pilas: guarda en la manga el as de una vaguedad en el pliego de condiciones sobre los plazos de ejecución. Por fin, el jueves escribe: «Pilas instaladas y luces del árbol funcionando. Incidencia núm. 0001/21 solucionada. Firmado a 7 de enero de 2021».