En Extremadura ha caído el precio de la vivienda un 8,7% durante el primer trimestre de este año con respecto al último trimestre de 2012. Una bajada aún mayor, superior al 13%, si lo comparamos con el primer trimestre del año pasado. Se trata de un descenso histórico. En España la bajada trimestral ha sido del 6,6% y la anual del 14%. Un descenso que en la región extremeña ha afectado más al precio de la vivienda nueva que a la de segunda mano. Una circunstancia que sólo se ha dado en esta comunidad y en Canarias y que ha venido acentuándose sobre todo desde finales del año pasado como se puede ver en el gráfico elaborado según los datos del INE.
Y tal bajada de precios de la vivienda nueva ha provocado que durante este inicio de año se haya disparado la venta de pisos a estrenar. Para qué comprar uno ya usado si puedo tener uno nuevo por el mismo precio e incluso más barato, se habrán preguntado muchos. De hecho, no sólo se ha doblado durante el primer cuatrimestre el número de transmisiones de vivienda nueva con respecto al mismo periodo del año pasado (como se puede observar en el gráfico siguiente), sino que hasta abril del presente ejercicio ya se había vendido casi dos tercios del total de viviendas nuevas que se transmitieron en 2012. El año pasado se vendieron en total 2.443 y en los cuatro primeros meses del presente año las transmisiones habían ascendido a 1.449.
Mientras tanto, ha habido una “sonada” bajada de la vivienda de segunda mano, de hasta un 34% en Extremadura entre abril de 2012 y abril de 2013, según los últimos datos del INE. Por el contrario, la compraventa de vivienda nueva ha subido un 54% durante el mismo periodo. Esto supone un cambio radical desde que comenzó la crisis. En 2007, 8 de cada 10 pisos que se vendían eran de segunda mano; ahora solo suponen 5 de cada 10.
¿Por qué ha ocurrido esto?
Porque casi toda la vivienda nueva disponible para la venta en estos momentos está en manos de los bancos, me cuenta Mariano García, el presidente de la Asociación de empresarios de intermediación inmobiliaria de Extremadura, integrada en COEBA. Las entidades financieras están “tirando” los precios. Les urge deshacerse de aquellas promociones de viviendas que se quedaron sin vender justo cuando pinchó la burbuja inmobiliaria.
Por eso ha sido habitual durante estos últimos meses escuchar en radio y leer en prensa anuncios de ventas masivas de bloques enteros de viviendas a precios muy reducidos y con una financiación del 100%. He conocido incluso de manera muy directa casos de personas que no tenían pensado comprar, pero que tras la llamada de su entidad financiera haciéndoles una “super oferta” no se pudieron resistir.
Entidades financieras que además están acudiendo a las empresas inmobiliarias tradicionales para intentar “colocar” sus pisos. Se da la circunstancia de que los bancos les están salvando la cuenta de resultados a muchos negocios del sector. “Igual que antes trabajábamos con las constructoras, ahora lo hacemos para los bancos; y la manera de actuar es igual”, reconoce García. “Ellos saben de financiación pero no cómo vender pisos”.
Sareb tiene 1500 pisos para vender en Extremadura.
Estos precios tan bajos los está liderando la banca saneada (las entidades que no han necesitado de ayudas públicas para sanear sus resultados) y no el Sareb o más conocido como “banco malo”, al que la banca rescatada tuvo que transferir todos sus inmuebles de dudoso cobro. Cuando se pensaba que la Sareb iba a regular el mercado (tal y como pensaba que iba a pasar cuando escribí hace meses mi post “El banco malo, un buen negocio“), al tener la mayor cartera inmobiliaria de España con 56.000 viviendas para su venta, resulta que sólo ha vendido 550 pisos desde febrero.
En Extremadura la Sareb tiene que vender 1.500 pisos (el 2,7% del total), según información de la propia entidad, que rehusó darme el dato de cuántos ha vendido durante esos primeros meses del año. La mayoría de las operaciones que ha hecho el banco malo ha tenido que ver con el alquiler.
Sube el arrendamiento.
El presidente de las inmobiliarias reconoce que la situación económica está provocando “el giro hacia el arrendamiento”. Y es que el precio del alquiler también sigue bajando. En Extremadura el precio ha caído un 7% en abril con respecto al mismo mes del año anterior; mientras que la media española ha sido del 4,8%, según datos de fotocasa.es. Como curiosidad, Mérida ha sido la ciudad española donde más ha caído el alquiler. Es un 11% más barato hoy que hace un año.