Para entender rápidamente las repercusiones de una decisión económica, en muchas ocasiones mostrar el dato por habitante es lo más clarificador. Mucho más que dar cifras absolutas. Creo que echar un vistazo al margen de endeudamiento adicional por habitante que ha resultado de la última reunión de los consejeros de Hacienda y el Gobierno (el Consejo de Política Fiscal y Financiera) en la que se aprobaron los diferentes objetivos de déficit para este año es clave para entender el resultado; quién ha salido ganando, perdiendo o se ha quedado igual que estaba.
Con los datos absolutos de “a Extremadura se le ha autorizado a gastar 168 millones de euros de más; a Cataluña 3.173 millones; o a la Comunidad Valenciana 1.618” puede que no se llegue a entender claramente el resultado de dicha reunión; porque estos datos están referidos al PIB, al tamaño de la economía de cada comunidad autónoma, que obviamente es muy diferente entre ellas. Pero el resultado por habitante refleja muy bien cómo va a repercutir el déficit en un catalán, extremeño, valenciano, murciano y en el resto de españoles. De hecho, el dato por habitante es el gran titular en los medios de comunicación cuando el Gobierno presenta los presupuestos generales del Estado y se quieren comparar anualmente las partidas de dinero en infraestructuras y pagos que hace a las Comunidades Autónomas. También es el dato que les sirve a los políticos para reprocharse si durante su mandato daban o quitaban a las diferentes regiones.
Pues en este caso del déficit asimétrico (diferente para cada región) el dato por habitante es muy revelador. El siguiente gráfico muestra el dinero que el Gobierno ha autorizado a cada ciudadano de cada comunidad autónoma a pedir como máximo a los bancos para poder financiarse este año.
Como se puede ver, a Extremadura se le permitirá un gasto por encima de los ingresos por cada extremeño de 152 euros, mientras que para cada catalán será del triple, 421 euros. Una diferencia de 269 euros. Hasta a siete comunidades se les permitirá gastar de más el doble que a los extremeños. Las cifras son el resultado de calcular el montante en euros de lo que supone cada uno de los déficit decididos para cada comunidad autónoma según su PIB estimado por el Ministerio de Hacienda para 2013 y dividir entre su población, según el último censo publicado por el INE.
¿Qué hubiera pasado con un déficit igual para todos?
Que Extremadura podría haber estado autorizada este año a gastar por encima de sus ingresos mucho más de lo que lo va a hacer por cumplir con los objetivos marcados. Si para todos se hubiera decidido el objetivo de déficit del 1,3% (el que debe resultar de la suma del conjunto de las CC.AA.) este año, la región extremeña podría haber llegado a endeudarse hasta en 219 millones de euros y no en los 168 como máximo de ahora; es decir, podría haber tenido aún la posibilidad de pedir financiación por valor de 51 millones más. En el lado contrario, Cataluña. De los 3.173 millones de euros que va a poder gastar de más por haberle concedido un objetivo de déficit del 1,58%, reduciría esa cifra hasta los 2.619 millones con el 1,3%; es decir, 554 millones menos.
Por habitante, Extremadura podría haber tenido una capacidad de endeudamiento de 198 euros (46 euros más que ahora) y Cataluña 384 (37 euros menos). Es decir, la diferencia entre la que más gastará y la que menos pasaría de ser el triple, al doble.
En todo este asunto es conveniente tener en cuenta que, siempre que tengas unas cuentas saneadas, cuanto menos déficit, mejor. El déficit es el gasto por encima de los ingresos que tienes y eso hay que financiarlo pidiéndolo a los bancos. Por lo tanto, acaba convirtiéndose en deuda. Y esto no es bueno.
A Extremadura, como al resto de comunidades, se le ha marcado un límite de gasto adicional a lo que pueda pagar con los ingresos. A lo mejor, no es necesario llegar al 1% de déficit si todos los servicios están cubiertos (algo difícil en la situación económica actual), pero es al menos un alivio que te autoricen a poder pedir a los bancos cuanto más dinero mejor. ¿En qué cantidad?. Las necesidades lo dirán.
Es difícil para Extremadura asimilar el ser la comunidad a la que menos déficit se le ha autorizado, del 1%, a pesar de haber cumplido de sobra el año pasado con el objetivo del 1,5% (acabó con el 0,69%, el más bajo) cuando a las comunidades que incumplieron acabando 2012 por encima del 1,5% ( Valencia, Murcia, Andalucía, Cataluña, Baleares y Castilla La Mancha) se les va a permitir un déficit muy superior a la media del 1,3%.Y por lo tanto, al mismo tiempo, sería más difícil aún asimilar más ajustes para Extremadur, tener que cumplir escrupulosamente con el 1% de déficit y mientras recordar que no hubo penalización alguna a las autonomías que incumplieron el año pasado.