Pinofranqueado, en la comarca cacereña de Las Hurdes, ha sido el municipio de menos de 20.000 habitantes que terminó 2015 con el mejor saldo migratorio en Extremadura. El incremento de su censo por los cambios de residencia fue de 41 habitantes; las personas que se establecieron en la población superaron a las que se marcharon. La mayoría de los nuevos vecinos procedieron de otras comunidades autónomas. Diecisiete de los nuevos vecinos llegaron del extranjero. A Pinofranqueado le siguen Fuente del Maestre (+34), Acebo (+26) y Castuera (+18).
Son datos del último informe sobre variaciones residenciales publicados por el Instituto de Estadística de Extremadura, que refleja también que el pueblo que más habitantes perdió fue Montijo, cuyo saldo migratorio fue de – 121. Le siguen en los últimos puestos Jerez de los Caballeros (-67), Madrigal de la Vera (-65), Trujillo (-60) y Jaraíz de la Vera (-54).
Si miramos sólo a las grandes ciudades, Mérida fue la que más población ganó mientras que Badajoz fue la que más perdió.
En su conjunto, . El saldo migratorio con el resto de comunidades autónomas fue de -3.221 personas, mientras que, por primera vez en años, el saldo migratorio con el extranjero fue positivo, de 681 personas.