El primer encuentro con la artista extremeña, fue cuanto menos interesante. En un viaje a la capital cacereña para visitar la muestra anual de arte contemporáneo Foro Sur me topé con una chica que tenía sus cuadros expuestos en el suelo de la plaza San Marcos. Mientras que le echaba un vistazo, Verónica me abordó con la explicación del proyecto con una pasión que me hizo entender rápidamente la entrega que pone por su obra la joven artista extremeña. Se trataba de “Crisis Galery. Arte por los suelos” un proyecto que acercaba el arte a aquellas personas que más difícil lo tienen regalándoles una obra. La condición era ser parado, con la tarjeta del SEXPE de prestación por desempleo tenías derecho a una obra de arte gratis. La segunda condición: posar con la obra ante su cámara para que formase parte de la acción, la cual se puede visitar en la red (yo lo hice): http://www.crisisgallery.blogspot.com.es/2011/05/intercambio-35-david.html
“Crisis Galery. Arte por los suelos” es una idea genial, un modo de dar a conocer su obra y además crear un vínculo entre artista y consumidor. Pero este proyecto no está vacío. Se sustenta en la crítica social y acción social. La acción se caracteriza por hacer que las obras materiales no se queden en el mero objeto artístico, si no que la artista crea un “proceso” con unas reglas (estar en paro supone regalar una obra de arte al espectador) con el cual enviar un mensaje. En este caso el mensaje es el democratizar el arte y al mismo tiempo hacer una crítica social de un país que despierta cada mañana con casi 6 millones de desempleados. Verónica apuesta por el arte que está con la gente, en contra de un mercado que esta controlado por una élite adinerada, inalcanzable para los bolsillos de la clase media trabajadora.
Verónica Bueno mira de frente a los problemas sociales de nuestro tiempo. La muerte y lo macabro son una constante en su producción, la muerte entendida como algo que nos rodea en nuestro día a día en medios de comunicación, conversaciones, películas, canciones.
En la serie “Carroñeros, muertos y otros desastres” los cuadros son collages de imágenes muy diferentes entre ellas, donde conviven un Cristo del sagrado corazón con imágenes de niños escualidos y comitivas fúnebres de atentados. En definitiva un retrato de nuestro tiempo donde las imágenes circulan por nuestro imaginario visual entremezclándose y creando unidades comunicativas mayores.
Vivimos inmunizados de imágenes duras sobre la muerte y el sufrimiento. Los telediarios nos bombardean de imágenes de atentados, asesinatos, accidentes y catástrofes. La muerte convive con nosotros, pero en nuestra sociedad aun sigue siendo un tabú del que se habla con respeto y como algo que nunca va a suceder, mientras que otras culturas afrontan con una actitud más conciliadora el hecho de que la muerte forma parte de nuestras vidas. Nosotros la vemos como algo muy lejano, como algo que le sucede al vecino.
Verónica pone su foco sobre la parte más dura de nuestros tiempos, como un ejercicio de reflexión sobre donde va nuestra no evolución. Nuestro mundo lleno de desigualdades, injusticias, guerras inexplicables y sin sentido. Como una reportera de guerra, sus pinturas son puñetazos al ojo y a nuestras conciencias.
Las técnicas utilizadas por Bueno son muy dispares desde las acuarelas, aguadas, grabado, óleos, acrílicos y dibujo a lápiz, con un estilo agresivo mezclando las diferentes técnicas a modo de collage. Con un dibujo muy potente y delicado además de un uso muy inteligente del color.
La vida y la fugacidad de esta es otro de los temas tratados en su obra, las calaveras y lo relojes de arena nos envían un mensaje muy claro, el tiempo pasa. Un Carpe Diem contemporáneo, un mensaje directo: vive la vida porque la muerte nos acecha. Su obra me ha traído a la memoria la obra del barroco “In ictu oculi” de Valdés Leal que puede ser visitada en la Santa Caridad de Sevilla, una pintura que habla de la fugacidad de la vida y el triunfo de la muerte sobre la vida. Una de las ideas que fue desarrollada durante el barroco, la iconografía de la obra prentende transmitir la idea de que todo lo material es insignificante ya que la muerte arrasa con toda la riqueza atesorada en vida.
En la página web de la artista (http://www.verobueno.com/) se lee una leyenda que dice: “por los laberintos del arte contemporáneo…” porque verónica navega en los mares convulsos del arte contemporáneo de nuestra comunidad y nuestro país. Mares enmudecidos y donde solo unos artistas asimilados y aceptados por el sistema del arte son los que acaparan las ferias, exposiciones, galerías, reportajes,etc. Verónica, apuesta por hacer de su arte un arma de denuncia social, actitud muy valiente en los tiempos que corren donde el arte se llena de banalidades sin ningún tipo de fin comunicativo más que la “paja mental” del artista. Por ello, admiro la decisión de la artista por elegir un discurso coherente y activista. Les invito a que visiten su web, no te dejará indiferente.