Las pinturas negras, fueron realizadas con una edad muy avanzada, los achaques de la edad y una profunda sordera le llevaron al aislamiento total dejando a un lado su actividad como pintor de cámara. En la conocida quinta del sordo, el maestro aragonés llevó a cabo una serie de murales donde dejó correr su imaginación; representando escenas críticas contra la sociedad, el clero, la aristocracia, la inquisición e incluso temas mitológicos. La más conocida es el “Saturno devorando a sus hijo”, “Dos viejos comiendo”, “duelo a garrotazos” entre otras, donde realizó una renovación de la iconografía clásica representando a personajes casi cadavéricos y monstruosos.
En estas obras paradigmáticas vemos como el pintor no se atiene a ningún tipo de filtro censurador. Las pinturas son realizadas para su hogar y por tanto destinada al disfrute privado y al alcance del círculo más privado del aragonés. Es la obra más deliberada y hermética del pintor, una colección que parece transmitirnos un mensaje sobre el mundo que él mismo había vivido. Violencia, corrupción, egoísmo, belleza, superstición, etcétera se entremezclan como si de una capilla sixtina laica se tratase.
No debemos olvidar que Goya tuvo problemas con su serie de grabados “Caprichos”. Las cuales junto a las planchas de cobre fueron entregadas a Calcografía Nacional para ahorrarse problemas con la Santa Inquisición (las planchas actualmente las podemos ver expuestas en el centro de Calcografía Nacional de Madrid). En ellas hacía una sutil aunque dura crítica hacia el clero, tradiciones, aristocracia, monarquía e incluso altos mandatarios y camarilleros del rey como a nuestro paisano Manuel Godoy, el cual fue representado como un asno tal y como aseguran muchos historiadores.
Perro semi hundido es una de esas obras que personalmente más me ha intrigado a lo largo de mi estudio de la historia del arte. Es una obra enigmática y casi inexplicable por su indeterminación y además por estar inacabada y sobre la que se tiene muy pocos datos.
Rothko
Se trata de una superficie pintada de color terroso que propiamente se podría comparar con las pinturas de Mark Rothko. Las cuales se caracterizan por ser manchas de pinturas sobre grandes paneles donde el color es el protagonista, con todo su poder de sinestesia. No existen formas antropomorfas o zoomorfas reconocibles. Es el poder del color con sus infinidad de evocaciones estéticas. Rothko podría haber tomado inspiración de esta pintura para sus infinidad de obras abstractas.
Perro semihundido
En un pequeño talud, abajo, casi arropado por el color un perrillo mira hacia arriba con cara de estar pasándolo muy mal. Algunos autores han argumentado que se trata de una pintura inacabada, el color neutro sería el fondo de lo que más tarde sería una composición más amplia compuesta por más figuras.
Pero, a nosotros nos ha llegado como una pintura con una gran potencia visual y emocional. El perrillo con cara de miedo y desesperación, es un reflejo de la situación personal que atravesaba Francisco de Goya. No debemos olvidar que el artista es un afrancesado y como tal es perseguido. Además, el pintor ha vivido muy de cerca la Guerra de la Independencia, recordemos las pinturas del “Fusilamientos del 3 de mayo” o “Desastres de la Guerra” donde se representan las crueldades de la guerra y por último los graves problemas de salud por los que atravesaba el maestros. Son datos que argumentan que en el perrillo desolado representa su situación personal.
Por tanto, las obras de su última etapa están cargadas de un dramatismo y expresión de gran dureza, las formas clásicas y comedidas han sido sustituidas por manchas de color, los rostros son muecas de dolor y desesperación. El pintor mantiene en su pintura un diálogo entre su tiempo y su personalidad.
Hasta ahora los pintores habían sido meramente reproductores de la realidad. En cambio la gran diferencia como artista de Goya es que expresa su mundo y su sentir a través de las figuras de los personajes. Un ser indefenso en mitad de un caos del cual es muy difícil salir. Por ello, Goya es uno de los visionarios de lo que más tarde llegará, donde el sentir y pensamiento del pintor toma un papel relevante.
Podríamos comparar este perrillo desolado ante la inmensidad con el cuadro “caminante a un mar de niebla” de Friederich, es un eco de lo sublime y representación del mundo como algo que nos desborda, idea que fue desarrollada en el XIX por pintores románticos.
Edvard Munch
Por ejemplo, ¿Qué diferencia hay entre el cuadro de “viejos tomando sopa” y “el grito” de Munch, los dos son representaciones grotescas, las formas se retuercen y el dibujo se convierte en formas difusas casi irreales, caricaturas feas que pretenden transmitir el desasosiego. Por ello, no podía hablar de arte contemporáneo sin mencionar a uno de los artistas que abrió caminos al arte moderno. Goya fue un adelantado a su tiempo, aunque durante un tiempo ha sido maltratado por historiadores del arte. Los cuales argumentaban que era un inculto que imitaba a Velázquez. Pero en sus cuadros vemos el ir más allá.
Además, abrió nuevas puertas en la búsqueda de la belleza en lo grotesco y feo. Una de las premisas en las que se sustenta gran parte del arte contemporáneo. Es el “El arte de lo feo”