Seguimos con los temitas veraniegos y preparativos de viaje. En mi caso continuamos dándole vueltas, y eso que nos queda menos y nada. Habra pueblo, no sólo porque lo diga Aquarius sino porque nos mola. Y además ¿playa, montaña? ¿ciudad, campo? ¿museos o paisajes? ¿en coche, en tren, en avión, en burra, a pata? Aún hay tiempo de pensarlo bien.
Previendo varias opciones, nos preguntamos qué necesitamos para que el niño pueda montar el avión. ¿Tendrá que llevar DNI? ¿Nos darán cita? ¿Estaremos a tiempo? Miedo. Esta mañana he hecho algunas llamadas para saber a qué nos enfrentamos. Al final, he terminado cogiendo la cita para DNI y pasaporte y así, aunque no volemos, ya lo tendremos para próximas ocasiones. Me han informado de que casi todas las compañías exigen el DNI a los menores para volar, aunque, ante la duda, mejor contactar con las empresas.
Me entran como nervios en la tripa cuando pienso que mi chiquitajo ya va a tener ese carné que es para toda la vida y sirve para todos los trámites importantes (y también para los chorras). Yo hasta los 14 años no me hice el carné, así que el momento me parece trascendente. Será la semana que viene.
El carné electrónico lo hacen y te lo dan en el momento. El niño debe ir acompañado del padre, la madre o un tutor autorizado. Se necesita una partida de nacimiento exclusiva para la solicitud del DNI y que se obtiene en el Registro Civil. También una partida de empadronamiento, que expide el Ayuntamiento. También una foto en color. Y 10,30 euros . A ver cómo va el trámite y cómo se porta el peque cuando tenga que estampar su huella dactilar en tinta y quedar fichado para siempre.