FOTOGRAFÍAS DEL JARDÍN DE LORENZO.
Si meneamos el cajón de las fotos desordenadas de la Mirada Atenta, descubrimos que su objetivo tiene una curiosidad insaciable, y esa es precisamente una de las claves de su éxito: nunca se conforma con lo que ve, y sus ojos y su mano sobre la cámara no descansan.
Y es que Lorenzo Cordero nunca se separa de su cámara, ni siquiera en vacaciones o los fines de semana que descansa. Además de las fotos de moda y de astronomía, de las que ya hemos hablado en el blog, también le gustan las fotos de naturaleza, un ámbito en el que empezó a trabajar en 1985, y en el que incide sobre todo cuando se encuentra tranquilito en su casa, situada a las afueras de Cáceres, rodeada de campo y con un amplio jardín.
Pronto descubrió que no hacía falta irse al quinto pino para hacer buenas fotos de naturaleza, sino que que su propio jardín, dotado de un estanque, representaba un mundo infinito lleno de posibilidades porque hay cientos de tipo de insectos, ranas, culebras, y pájaros de toda clase, incluidas las exóticas que él cría como afición. Vamos, que fauna a la que disparar clics no le falta.
Por ello, a veces sale al jardín cargado con su cámara y su teleobjetivo y se dedica a buscar bichitos, o a poner comida en los lugares más bonitos para atraer a los pájaros. Ello le ha empujado a observar y a leer todo lo posible de insectos, con cuyos nombres en latín se hace a veces un lío, y a intentar aprender las costumbres y formas de actuar de los anfibios y animales a los que trata de fotografiar para saber cómo y cuándo sorprenderles con su objetivo.
Además de pájaros, también se ha aficionado a las ranas y sapos que se cuelan a veces en su jardín, y a los que les prepara su estanque para ver si se quedan, y ha conseguido que algunos ejemplares ya formen parte de su universo doméstico y de su libro de fotografías de naturalista aficionado.
Para hacer fotos de naturaleza, Lorenzo recomienda ” mucha paciencia y un buen equipo“, utilizar la función Macro para los insectos, y conocer previamente a las ‘presas’, como haría un buen cazador.