¿Quieres causar una buena impresión desde que tu agasajado reciba el regalo de estas fiestas? Prueba a personalizar los envoltorios y huye de entregarlos con el papel con el que lo presentan en los grandes almacenes. Busca alguna caja de zapatos que esté en buen estado y despréndela de toda clase de etiquetas. Hazte con un bote de cola o pegamento y un papel que te guste. Forra la caja y busca unos cromos, fotografías o lazos para distinguir tu regalo de todos los demás. Si no eres muy ‘manitas’ y crees que la caja no te resultará del todo bien, compra piruletas rojas y pégalas sobre papeles lisos o con motivos navideños. Puedes rematar la faena con una pequeña tarjeta en la que escribas tu nombre o una estrella de cinta. Así conseguirás causar una buena impresión y que el empeño de su elaboración demuestre tus buenas intenciones.