Para los que tenemos gafas, no hay nada más molesto que limpiarlas y ver cómo a los dos segundos vuelven a estar sucias. Para que los cristales queden transparentes y la montura con brillo, frótalos suavemente con un poco de ceniza y un trocito de papel de periódico. Prueba también a limpiar las lentes con un poco de lavavajillas y agua o con jabón líquido antigrasa. Pon un poco de este jabón en los dedos y pásalos por el cristal. Después, enjuaga con abundante agua y deja que se sequen solos. También hay quien pone una gota de vinagre o de vodka en cada cristal y los limpia con los mismos dedos. Luego frota suavemente con un paño. También hay quien pasa a las lentes un algodón empapado de colonia. Yo soy un poco maniática con las gafas, así que las lavo con mis mismos dedos y jabón de tocador. Las enjuago y seco con papel higiénico.