Los tonos nacarados y metalizados pegarán fuerte esta primavera en cuanto a sombras de ojos se refiere. Los metalizados quedan bastante sofisticados, pero sólo están indicados para usarlos con luz artificial y en ocasiones muy especiales. Además, necesitan una piel joven y si tus ojos muestran algunas arruguitas, mejor olvida estos tonos. Sin embargo, los tonos nacarados van bien a cualquier edad y consiguen un efecto ‘perlado’ que suavizan la expresión. Hay maquilladores profesionales que emplean una sombra blanca nacarada con la que crean dos puntos de luz bastante favorecedores. Sitúan uno bajo el arco de la ceja y otro en el ángulo interior del ojo, junto a la nariz. Si optas por hacerte con una sombra de color intensa para los ojos con motivo de alguna celebración, usa un tono suave en los labios para no parecer maquillada en exceso.