A la hora de elegir los tiestos en los que plantar las macetas, debes tener en cuenta que los más indicados son aquellos que están elaborados en barro porque absorben mejor la humedad. Los tiestos de plástico son más baratos, más ligeros y más fáciles de conservar pero se recalientan mucho si los expones al sol. Por lo que pueden dañar las raíces. También puedes encontrar tiestos de madera, cinc u otros materiales. Cuando vayas a comprar el tiesto, comprueba que tenga un orificio en la parte inferior para que pueda salir el agua y no termine pudriendo la planta. Pon una piedra o un trozo de otro tiesto con la concavidad hacia abajo para asegurar el desagüe. Si la maceta se apoya directamente en el suelo, hazle un orificio lateral para que expulse mejor el agua. De todas maneras, es conveniente que no se apoyen en el suelo.