El mayor problema a la hora de descongelar chorizo o cualquier tipo de chacina consiste en que suelta su ‘caldito’ y, además de dejarlo todo perdido, pierda parte de su sabor y sus características. Para evitar que el chorizo termine perdiendo su ‘jugo’ y manchando el suelo de la cocina o las bandejas, la mejor solución es envolverlo. Primero, envuelve la rueda de chorizo en papel absorbente especial para cocina y luego en papel de periódico. Después, pon todas las ruedas en una batea o bandeja de plástico y espera a que se descongele. Tardará aproximadamente un día en descongelarse. Tanto el papel de cocina como el de periódico absorberán la humedad de la carne y se descongelará sin quedar empapado. Así, recuperará todas sus cualidades de aromas y sabor después de la descongelación.