A estas alturas del año, resulta difí-
cil entrar en una tienda de com-
plementos y no toparse con colla-
res y pendientes cuyos protago-
nistas son cuernos. De todos los
colores y en distintos materiales,
marcan tendencia desde el pasado
invierno. Si guardas auténticas pie-
zas de marfil, prepáralas para lucir-
las en su mayor esplendor. Para que el marfil recupere su blancura
original, dale un baño de leche durante 24 horas y pásalas después
por agua oxigenada. Si tienes prisa y no puedes esperar un día entero,
disuelve un puñado de sal de cocina en el zumo de medio limón. De
esta manera, también devolverás a las piezas de marfil su tono ori-
ginal. No relegues estos adornos a las salidas nocturnas, sino llévalas
a cualquier hora del día porque siempre favorecen y no son osten- tosas. Luce tus joyas de marfil como el auténtico tesoro que son.