Uno de los trucos que utilizan muchas madres cuando los alimentos se pegan a las sartenes es dorar sal en ellas. El procedimiento a seguir consiste en poner un buen puñado de sal en la sartén en la que se peguen los alimentos cuando los cocines y se calienta hasta que la sal comience a tostarse. No te preocupes si la sal salta por el calor, pero ten cuidado de que no te llegue. Una vez que esté ya dorada, se tira la sal y se pasa un paño por la sartén. No se debe fregar con detergentes jabonosos ni con agua antes de cocinar el alimento que quieras. Es un buen truco para llevar a cabo antes de freír unos huevos o hacer cualquier tortilla. De esta manera, no tendrás que convertir tus tortillas de patatas en revueltos cuando el huevo se pegue a la sartén. Quedará como nueva. Y lista para cocinar y freír todo lo que quieras.