La multinacional francesa Danone lleva años ganando una fortuna con Actimel, un producto que, según nos dice, ‘ayuda a tus defensa’. Esta publicidad no ha podido ser avalada científicamente.
Tras irrumpir en el mercado alimentario con una fuerza que no tenía antecedentes obteniendo un enorme éxito de ventas, desde hace aproximadamente tres años el Actimel ha sufrido duros varapalos por su publicidad. Recordemos que según Danone, Actimel refuerza las defensas naturales del organismo. No ha podido ser demostrado científicamente.
En 2009, Actimel recibió en Alemania, por el eslogan “Actimel activa tus defensas”, el premio a la mentira publicitaria más insolente, un galardón que otorga Foodwatch, una asociación alemana sin ánimo de lucro que intenta defender los intereses y derechos de los consumidores alemanes y que, entre otras cosas, denuncia las prácticas publicitarias engañosas.
Posteriormente, el Advertising Standards Authority (ASA), un órgano independiente del Reino Unido creado por la industria de la publicidad con el propósito de proteger a los consumidores, atendió la queja realizada por un consumidor sobre el anuncio de Actimel en el que aparecía el siguiente mensaje: ‘Actimel ayuda a mantener las defensas de tus hijos, hecho científicamente probado’. Tras evaluar la documentación presentada por Danone para justificar dicho eslogan, el ASA dictaminó que ese reclamo publicitario no tiene solidez en base a los estudios aportados, llamando al orden a la multinacional francesa y obligando a retirar el anuncio hasta que se modificara dicha publicidad. Al parecer, Danone presentó diversos estudios para avalar tales beneficios que, pese a estar cerca de demostrar lo que aseguran, no justifican totalmente el mensaje publicitario.
Al año siguiente, en 2010, Foodwatch Países Bajos ‘premió’ al Actimel con el Gouden Windei (Huevo Hueco de Oro) a la publicidad más engañosa y, por si faltaba poco, la organización de defensa de los consumidores española FACUA otorgó en ese mismo año a un anuncio de Danone relacionado con el Actimel el dudoso honor de ser el segundo peor anuncio del año en España (el de Susana Griso). Danone para contrarrestar lo que considera una campaña de desprestigio aconseja la lectura de informes favorables de su producto.
También en EEUU, Dannon Co. (filial estadounidense de Danone), pagó 21 millones de dólares (tras llegar a un acuerdo extrajudicial) por exagerar las propiedades de su yogur Activia y de la bebida láctea DanActive (Actimel). La Comisión Federal de Comercio (FTF) declaró que no existe evidencia científica que avale que las bacterias de su yogur Activia ayuden a mejorar el tránsito intestinal y las del Actimel aumenten las defensas. Danone tuvo que retirar los eslóganes engañosos tanto de los yogures y bebidas como de la publicidad.
Pero uno de los mayores golpes que ha recibido Danone le llegó en 2010 por parte de la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) que, en un informe demoledor, rechazó los más de 20 trabajos de investigación que pretendían avalar los beneficios del Actimel.
Desde septiembre de 2011, Danone no publicita las ventajas que el consumo de Actimel tienen para las defensas. En Francia ha habido una polémica a causa de las afirmaciones del científico Didier Raoult, del Laboratorio de Virología de la Timone de Marsella, quien en un artículo publicado en la prestigiosa revista científica Nature en 2009, aseguraba que los yogures y otras bebidas lácteas hinchadas de pro bióticos “que nos hacen tragar desde hace cerca de 20 años tendrían una gran parte de responsabilidad en la epidemia de obesidad que golpea a los niños. Los pro bióticos que Danone añade a saco en diversos yogures son los mismos que se utilizan desde hace mucho tiempo en la cría industrial para hacer engordar más rápidamente a los cerdos y pollos. Un cerdo atiborrado de pro bióticos, gana un 10% en la báscula”, afirmaba el científico.
Danone, por su parte, responde a estas acusaciones asegurando que las afirmaciones de Didier Raoult no están basadas en un estudio científico riguroso y aclaran que “la única razón por la que se suministra probióticos a los animales de granja es para que se beneficien de sus propiedades saludables sobre la flora intestinal y así prevenir posibles infecciones que pueden entorpecer su adecuado desarrollo y crecimiento”. La multinacional para apoyar la falsedad de la relación de los probióticos con el engorde de ganado aporta los desmentidos de la Sociedad española de Prebióticos y Probióticos (SEPYP) http://www.sepyp.es/es/tablon y la Sociedad Española de Dietistas y Nutricionistas (AEDN) http://www.aedn.es/noticias.php?id=341
Aunque parezca difícil de creer, al gigante francés le ha costado mucho dar marcha atrás, pero lo ha hecho. Anuncia una modificación de la publicidad a nivel europeo de Actimel y Activia , dejando de elogiar los beneficios para la salud. El lema que durante años ha acompañado a Actimel, ‘Ayuda a tus defensas’, ya no estará en el preparado láctico. Los alimentos declarados como saludables deberán tener a partir de ahora una base científica demostrada y comprobada por la EFSA.
El caso es que por el momento, esto no parece importar mucho a la multinacional francesa y menos sabiendo que durante el primer trimestre del año, Danone ha incrementado sus ingresos en un 8’3% y la venta de sus productos estrella, Activia y Actimel, no han sufrido por la retirada de las declaraciones saludables. Pero hay que tener en cuenta que la noticia es reciente y que a medida que los consumidores sepan que se han retirado las supuestas propiedades saludables, las ventas podrían caer.