Sobra decir que reírse del prójimo no puede considerarse como un ejercicio saludable ni mucho menos educado. No cuento entre mis amigos aquellos que utilizan la risa para menospreciar debilidad o defectos físicos de otros. Un servidor es partidario de reírse siempre de uno mismo, pues la risa puede envolverlo todo, y disfraza desde el […]