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Nunca olvidaré la primera vez que escuché a Los Planetas. Los descubrí bastante tarde, es posible que fuera en el año 96 ó 97, cuando los granadinos llevaban al menos tres o cuatro discos a las espaldas. Mi amigo Adolfo Campini no dejaba de hablarme de ellos, y siempre me ponía algún tema suyo en el equipo de música de su cuarto en cuando tenía una oportunidad. Yo escuchaba como si realmente estuviera interesado en aquel extraño sonido de guitarras altísimas y una voz casi inapreciable y quizás algo molesta. Absorbido por aquel entonces por las melodías del pop español en su línea más clásica (Duncan Dhu, presuntos implicados, Gabinete Caligari, Tam Tam Go!) no podía explicarme que veían u oían tantísimas personas para contar y cantar mil y una maravillas sobre aquella formación que a pesar de llevar la etiqueta de “grupo independiente” alcazaba cifras de ventas más que discretas por aquellos años.
Un día me arme de valor y me llevé prestado de su colección de Cds el Álbum “POP” de los Planetas. Nunca llegué a devolvérselo. Él mismo me pidió que me lo quedara si tanto me gustaba, y yo a cambio le regalé el de la banda sonora de “Esta noche cruzamos el Missisipi”.
No puedo explicar qué cosas pudieron pasar por mi cabeza para que de repente empezara a encontrar hasta bonitas aquellas melodías casi ininteligibles que J, cantante y estandarte de Los Planetas junto al guitarrista Floren, se empeñaba en introducir en mi cerebro. Poco después algunos ritmos de batería comenzaron a volverme loco, y desde entonces pinché una y otra vez aquel cd en mi viejo radio cd Sony hasta que acabé enamorado de este importante grupo español que ha sido sin lugar a dudas el único junto con quizás Australian Blonde y Deluxe, que sobrevivió al movimiento independiente que brotó en nuestro país a principio de los 90. Luego fueron llegando los demás discos y mi devoción por los Planetas fue tanta que sentí un aprofunda emoción la primera vez que tuve ocasión de compartir escenario con ellos, en el Festival Zorrock 98, en Puebla de la Reina.
El tema elegido hoy, en este viernes de canciones en Don de LOCH LOMOND es muy significativo. No aprendí a entender la letra en las canciones de Los Planetas hasta que no conseguir sacar palabra por palabra de la canción. Espero que ustedes sepan también obrar con maestría a la hora de entenderse con J. Merece la pena.
Una letra hermosa, una bonita melodía, guitarras envolventes y una batería de auténtico lujo que me transportan a aquellos años del final de mi adolescencia donde cada nuevo descubrimiento era como abrazar el cálido sol de un nuevo día. Con ustedes