>

Blogs

Enrique Falcó

ENRIQUE FALCÓ

LO QUE USTEDES DECIDAN…PERO LIBREMENTE

Pase lo que pase, ocurra lo que ocurra, hoy no va ser un día normal. Conste en acta que no quiero aburrirles, ni hablarles de política, ni tan siquiera hacerles partícipe de mi opinión a favor o en contra de la huelga general de la jornada de hoy 29 de Septiembre de 2010. Solo quiero transmitirles mi sincero deseo, que es el de que espero que actúen con total libertad, que bajo ningún concepto permitan objeciones ni interferencia alguna en cuanto a su derecho como personas y trabajadores. Hoy es un día para decidir libremente. Y elijan el camino que elijan, espero que lo transiten convencidos y con la cabeza bien alta. No tienen por qué justificarse ante nadie, sólo ante ustedes mismos. Ignoren a sus jefes, a sus compañeros, a sus comités de empresas y sindicatos, y actúen en consecuencia a sus ideas y circunstancias.

Ni que decir tiene que soy de la opinión que prohibir a una persona ejercer su derecho a la huelga bajo amenaza de despido es una acción tan malvada, repugnante e hiriente como desgraciadamente muy corriente y actual en los difíciles tiempos que corren para el mercado laboral. Ahora bien, prohibirle a un trabajador bajo dudosas artes, amenazas y malas acciones acudir a su puesto de trabajo es también un proceder tan mezquino y horrible si cabe.

A mi menda, personalmente, nunca le gustaron las masas. Cuando un número de personas a priori civilizados y normales, se unen en masa, bajo el anonimato de la muchedumbre, sacan a relucir sus bajezas más salvajes e incivilizadas. Nunca he comprendido los piquetes informativos, que de informativos no tienen nada. Yo ya soy muy mayorcito para enterarme por qué motivo hay convocada una huelga general, y no necesito que nadie me lo recuerde. Ahora bien, tampoco comprendo el celo de los empresarios, muy especialmente de las PYMES a prohibir con amenazas de despido. Esta cuestión, la de la convocatoria de una huelga general, no debe considerarse para nada ningún asunto personal del trabajador para con su empresa, y ostente el cargo que ostente el trabajador, ya sea del empleado más bajo, al puesto de mando más alto, debería primar ante todo la libertad del trabajador de acogerse a su derecho del ejercicio de la huelga o al de acudir a su puesto de trabajo.

Por lo tanto ya saben, mis queridos lectores, están en su derecho. Desde este humilde blog nunca le echaremos nada en cara sea cual sea el resultado de su decisión, mientras ésta, sea tomada con la libertad que se presupone a un trabajador del siglo XXI. Brindo una vez más (y no sé cuantas van) por todos ustedes, por este día, por su decisión, por su libertad.

Permítanme despedirme levantando un poco más alta de la cuenta mi copa de LOCH LOMOND por la persona más especial de mi vida, que hoy precisamente, cumple años, y con la que me voy a pegar una cenaza de tres al cuarto independientemente de lo que ocurra en este movidito día de huelga. Les aseguro que mi corazón no ejercerá nunca su derecho a la huelga cuando se trate de querer, amar, complacer, respetar y enamorar a aquellos que profesan para mí persona los mismos y bellos sentimientos que un servidor hacia ellos. Mi corazón no necesita de piquetes informativos ni de empresarios y jefecillos amenazadores. Espero que los suyos tampoco.

Don de LOCH LOMOND

Sobre el autor


septiembre 2010
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
27282930