Hoy 28 de Diciembre, celebramos la festividad de los Santos Inocentes. Quien suscribe se pregunta por qué no celebraremos al unísono tan magna festividad, pues todos contribuimos a ella de alguna u otra manera.
Inocentes somos todos, y Santos casi también ¡qué narices! Inocente es Zapatero pensando que va a sacarnos de la crisis y que va a repetir como candidato. Rajoy no se queda atrás apostando por su liderazgo y considerando que es él el más oportuno para hacerse con las riendas del país. Inocente es
Yo mismo no dejo de ser un Inocentón, cuando a diario espero en el cruce para incorporarme a la autopista a que algún Santo del volante me ceda amablemente el paso. Hace dos días sin ir más lejos un amigo al que hacía tiempo que no veía me dijo “Coño Enrique, si estás hasta más delgado” y yo, Inocente perdido, que me lo creo y empiezo a notar que la camisa ya me queda un poco más holgada… ¡Las ganas mías!
Lo dicho, pongámonos de acuerdo y felicitémonos por la calle, unos a otros, sin ningún tipo de distinción, porque el día de los Santos Inocentes es el día de todos nosotros. Podríamos elegir como mártir de la causa al bueno del Marqués de “Mamarrach de